Los Restauranteros somos bravos, oiga, así que después de la comilona en Cenador de Amós, pasamos por el hotel, duchita, y paseando por el Alto de Miranda hasta Cañadío, a tomar un par de vinos antes de cenar.
Sí, sí, aquí se come, se cena y se potea, y si no, no sea usté restaurantero.
Así que, a cenar. Y no quiero quejas ni peros.
Nos había diseñado nuestro sabio organizador, Javier Compostizo Urraca, más conocido en los ambientes como “Compos”, Jacomur en Verema, una cenita en uno de los locales más cools de la ciudad, en VORS.
Atmósfera guapa, excelente ubicación (allá donde acaba Pereda y comienza Castelar, frente al mar), buen trabajo de interiorismo… Bien, bien. La entrada, desconcertante, no sabes si entras en un pub, en un bar de playa o en un restaurante. Creo que entras en las tres cosas. Nosotros, al restaurante. Al trendy y concurrido restaurante.
Menú maridado, preparado para la ocasión, para los bravos restauranteros:
• Tartar de salmón con tomate asado especiado y guacamole
--- Petit Pitacum Rosado D.O. Bierzo
• Ensalada de bacalao, setas, pimientos, patata y pilpil
--- Beade Primacia D.O. Ribeiro
• Lasaña de centollo gratinada con salsa holandesa y verduras
--- Yenda Spicata Costa de Cantabria
• Ciruela rellena de cordero
--- Oloroso selección VORS D.O. Montilla Moriles
• Hojaldre con foie, huevo escalfado y salsa de oporto
--- Tomás Postigo D.O. Ribera del Duero
• Fresas salteadas con vinagre balsámico
--- PX Maestro Sierra D.O. Jerez
Una cena “la mar de agradable”. Bien pensada, pues pese a la interpretación que pueda desprenderse de la lectura de la comanda, no fue copiosa, tuvo puntos de frescura y ligereza sin perder solidez.
La cocina no es destacable, ni para bien ni para mal. Tonos de actualidad, con pocos guiños al terruño. El más claro, la lasaña de centollo, fue el mejor plato a mi criterio y al de la mesa en general según lo que allá se comentó.
El maridaje, para gustos, hubo división de opiniones en cuanto a la secuencia y las armonías.
Lo que es innegable, es que todo el personal intentó complacernos. Gente profesional, implicada y con ganas, con brillo en los ojos. Con esas premisas, más las comentadas de ubicación y entorno… éxito seguro.
Guapa experiencia.