Muy recomendable para los amantes del vino

Atravesando el "Pont Neuf" de la magnifica ciudad de Albi, cuya catedral y barrio medieval forman parte del patrimonio mundial de la humanidad de la Unesco, y a poca distancia del centro neuralgico de la ciudad (20 mn a pie), está ubicado el restaurante La Table du Sommelier, recomendado por la guía Michelin.

Fuimos a cenar un sábado por la noche a las 20h30 tras haber reservado previamente al mediodía (recomendado).
Lo primero que encontramos al entrar en el local es el bar, donde se pueden tomar unas tapas y degustar un buen vino antes de pasar a la mesa, y a continuación, antes de entrar en el comedor, la bodega a la vista, con 480 referencias de vinos de todo el territorio francés. Es un abanderado de los vinos del Sud-Ouest y del Languedoc. Los vinos se pueden degustar ya sea por copas, o en botella completa. También se pueden comprar para llevar.

El restaurante está dirigido por el sumiller Daniel Pestre secundado por su hijo y también sumiller Jeremy Pestre. El primero fue elegido en los años 90 mejor sumiller de Inglaterra, donde ejercía en esa época y en el 2004 la guía Pudlofrance lo nombró sumiller del año. En 2013 obtuvo además la mención de Maître-Restaurateur. Al frente de los fogones está secundado por un joven Chef de Montpellier, Aurélien Cabrol, que promete.

La decoración del restaurante es moderna, y agradable, se siente uno a gusto rápidamente. Los muros de ladrillo, recuerdan la arquitectura de la ciudad. Tiene una confortable terraza interior, que en invierno está cubierta y es allí donde nos aposentaron. Las mesas están desnudas, no hay manteles, hay salvamanteles con buenos cubiertos, vajilla de diseño y buenas copas. Las mesas no muy grandes, no están muy separadas las unas de las otras, al menos en la parte de la terraza donde nos encontrábamos, no pude bien ver el resto de salas. El ambiente no es muy silencioso, pero pienso que si no fuese asi se perdería el espíritu del local. El servicio de sala es amable, simpático, bueno y profesional. El servicio del vino es muy bueno. El restaurante posee también una "Armagnathèque" y una Cava de puros, con las mejores marcas de habanos.

El restaurante propone 5 interesantes menús, a 17€(al mediodía), 25€, 35€(2)(uno de ellos con vinos) y 48 €(con vinos) y una corta carta. Los productos son locales y de temporada.

Optamos por uno de los menús a 35 €, Menú Guy Blandin (entrante, plato principal y postre- 2 platos de cada a elegir)). Se podía añadir por 5 € más una degustacion de Cantal de la "Ferme Saint Salvy" con 20 meses de maduración acompañado con una confitura de temporada.
De primero MC tomó Nougat de foie gras mi-cuit, marmelade de fraise vinaigrée et sorbet de fruits rouges et bâtonnet de réglisse (Turrón de foie gras mi-cuit, mermelada de fresa al vinagre y sorbete de frutos rojos y bastoncillo de regaliz) - Excelente presentación. Muy logrado, daba la impresión de comer turrón de foie-gras. Sápida mezcla de sabores. Un acierto

Yo opté por Noix de Saint Jacques rôti aux olives vertes, espuma haddock, et fenouil et citron confit (Vieiras (3) asadas con aceitunas verdes, espuma haddock , hinojo y limón confitado)- No me sorprendió, pero me gustó mucho. Perfecta elaboración.

De segundo, MC tomó una Pièce de veau d'Aveyron rosé prune et sésame grillé, polenta poêlée aux artichauts et chorizo (Pieza de ternero lechal del Aveyron rosado, ciruela y sésamo a la plancha, polenta a la sartén de alcachofas y chorizo ) - MC me dio a probar el ternero lechal y estaba de fábula, excelente presentación, y excelente producto, plato muy sápido, sinfonía de sabores.

Yo tomé un Filet de turbot saisi, poêlée de girolles et riz croustillant, réduction de vin au poivre de Séchuan ( Filete (2) de rodaballo soasado con la piel crujiente, rebozuelos (cantharellus cibarius) pasados por la sartén y arroz crujiente, reducción de vino a la pimienta de Séchuan)- La presentación también excelente, la cocción del pescado perfecta , los rebozuelos, humm... . Sabroso.

No tomamos queso. De postre MC pidió un Blanc-manger "classique"avec fraises et glace au lait (Especie de flan "clásico" con fresas y helado de leche)- Muy bueno.
Yo me decante por unas Textures de chocolat noir et cerise Amarena confite Como me gusta el chocolate, disfruté. Excelente

El pan de la cena era bueno.

Tomamos un "pichet" de agua del grifo y una botella de vino blanco de la región que nos aconsejó Daniel Pestre para acompañar toda la cena. Un AOC Gaillac blanc Hommage à la truffe blanche 2012 cepages: Loin de l'œil, Mauzac y Sauvignon. Vino agradable y fresco. La mezcla de los cepages autoctonos con el sauvignon le daba un sabor muy personal. Nos gustó.
Finalizamos con 2 buenos cafés, acompañados de 2 "canelés",2 merengues y 2 trufas de chocolate.

La cuenta ascendió a 49,50 €/persona. Buena RCP. Tuvimos ocasión de conversar un buen momento con Daniel Pestre sobre el vino y la restauración. Nos pareció una persona sencilla, muy agradable y buen conocedor del mundo al que pertenece. El restaurante es muy recomendable. Buena cocina creativa. Si pasamos cerca de Albi seguro que volveremos.