Dioni y Anabel, Anabel y Dioni.

Habíamos estado en vísperas en El Celler de Can Roca, así que imagínense ustedes que no estaba el horno gastroduodenal para bollos… Pero oigan, había que comer, así que a la vuelta, con el consejo y la compañía de nuestros amigos Bienve y Mari (perdón, “el” Bienve y “la” Mari, osti tú, que son muy catalanes ellos) paramos a respostar en Roda de Bará, en el restaurante Cal Dioni del que ambos nos habían hablado maravillas.

Se encuentra ubicado en el casco urbano de la citada localidad pero a las afueras, con fácil acceso y aparcamiento.

Nada te llevaría a entrar si no lo conoces o no te llevan.

Pero, ay amigo, nada más traspasar la puerta te ves golpeado por una bofetada de “hogar”, otra de calidez, otra de rusticidad… “¡Me gusta este sitio, Bienve, me gusta!”. No tiene nada especial, pero hay algo que me hace sentirme a gustito.

A la entrada dos barriles a modo de mesas y separador, un anciano muy anciano comiendo solo, muy solo, y que sin embargo parecía acompañado… Familiaridad.

Mobiliario de madera oscura, suelo de gres, paredes hasta casi media altura con falsa piedra y el resto de un crema anaranjado salpicado por grandes fotografías artísticas de los platos de su carta… Austeridad, sencillez, pueblo ("huele a pueblo" como dice mi amigo Oti) pero mimo y calor. “¡Aquí se tiene que comer bien, Mari!”

Dos protagonistas absolutos: Dioni en los fogones y Anabel en sala.

Enseguida nos atiende cariñosamente Anabel, que muestra su afecto y confianza a mis amigos, y a nosotros las ganas de agradar.

Menú del día: por 17'90€ iva incluido puedes elegir un plato entre 6 primeros, otro entre 8 segundos y un postre.

Como todo tenía tan buena pinta y no había manera de decidirse por uno en concreto, mi mujer y yo optamos por pedir distinto y compartir. Ya sabemos que compartiresvivir… Tanto es así que pedimos un tercer segundo para los seis porque es que no podíamos renunciar a probar...

Dioni aparece entonces en escena en una fugaz escapada de la cocina, mostrando los mismos sentimientos y bonhomía que Anabel (hablábamos antes de cariño y ganas de agradar), y nos saca algo para tenernos entretenidos… Y así quedó la cosa:

-----Aperitivos:
Boquerones de Vilanova y aceituna de Aragón
Patatas fritas con huevo poche y parmesano
-----Entrantes:
Hojaldre de escalibada al horno de leña.
Canelón de ternera Cal Dioni con bechamel de trufa.
-----Principales:
Careta a la brasa torradita y con escamas de sal.
Entraña uruguaya a la brasa.
Paletilla de cordero al horno de leña con mongetes de Santa Pau.
-----Postres:
Flan de queso.
Flan de chocolate blanco.

Chico, no sé por dónde comenzar: es que todo estaba bueno. Todo. Muy bueno. Sin alardes ni alharacas, pero con sabor, profundidad, pasión, mimo, “manos”.

Esas patatas fritas en rodajas, caseras, ya anunciaban lo que se nos venía encima. Ese canelón con el que con cada bocado parecía que te comías un trozo de Cataluña lo confirmaba, esas mongetes de Santa Pau que en principio no eran sino una guarnición del cordero pero que a la postre se convirtieron en la estrella de la jornada lo consolidaban, y ese flan de queso (¿hay algún postre mejor en el mundo que un flan de queso bien hecho?) lo refrendaba. Pero qué bien, oiga.

Dioni y Anabel, Anabel y Dioni, cada vez que pasaron por la mesa exhibieron una humildad tremenda que aún da más valor a la realidad que no es otra que la siguiente: que son unos cracks. Y que tienen una ilusión expansiva.

Anabel impregna la sala, la contagia con de su cariño y buen rollo y ejecuta su trabajo con oficio. Y Dioni… Dioni es que cocina muy bien. Maneja las brasas (¡qué punto esa careta!), la Josper (“su” Josper”) como los ángeles. Y todo lo demás. De un menú de diario hace algo especial, sin fuegos artificiales, respetando la tradición (es familia de hosteleros) pero aplicando técnica, que no se ve pero se saborea. Cada bocado de cualquier plato es sencillo pero sabroso, en todos se percibe “chup-chup”, carencia de prisas, interés.

Como muestra de ello, la comentadas mongetes de Santa Pau. Las había sofrito y arreglado previamente y colocado después bajo el cordero, al que fueron robando parsimoniosamente los jugos que éste iba soltando... y los iban metabolizando hasta convertirse en un manjar exquisito, puro umami. ¿Conocen ustedes esos ternascos aragoneses hechos al horno con patatas panadera? Si, aquellos que al día siguiente abrías el horno, apartabas las piezas sobrantes del cordero y rebuscabas las patatas “acorderadas” que te comías con singular gozo y mirando a la puerta de reojo para que no te viera nadie… Pues esto es algo similar, pero a la catalana. En lugar de patatas, mongetes (pero el cordero era aragonés, jeje, si es que… ¿se nota que soy maño?).

La carta de vinos es cortita y discreta. Tomamos un cava, cómo no, un buen Recaredo Brut Nature 2007, servido en copas de flauta deficientes, aquí tienen que mejorar. Yo la cambié por una copa tipo burdeos, algo más cerradita, que le fue al pelo.

Esta pareja y su obra se merecen a mi juicio mejor entorno. Una masía catalana le iría pintiparada. Ellos lo saben. Seguro que un día lo consiguen, lo tienen todo para lograrlo.

Mucha suerte en vuestros nuevos proyectos!

  1. #1

    Gastiola

    Pues lo has dicho todo tú. Realmente quizás sean este tipo de restaurantes los que verdaderamente enamoran, a los que te acercarías a diario. Encima nos lo relatas en ese plan de literato de alto nivel que me has cogido últimamente y lo haces más atractivo aún. Estás que lo "flipas". :-) Un abrazo.

  2. #2

    Nowhereman

    ¿Ves como la magia puede surgir, en cualquier momento y en cualquier lugar?

  3. #3

    G-M.

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    A mi es que me gustan todos! (los restaurantes jeje)

    Ahora firmaba yo todos los fines de semana como éste: el sábado en uno de vanguardia y el domingo en uno de tradición "renovada".

    Gracias por tus piropos, SúperGasti!

    Abrazotes

    Aurelio

  4. #4

    G-M.

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    Jejeje, ¡nunca lo he dudado!

    Esas mongetes... tenía magia, de verdad que la tenían,

    Fíjate que le propuse a Dioni que, en lugar de poner en la carta "Paletilla de cordero al horno de leña con mongetes de Santa Pau", pusiera "Mongetes de Santa Pau con paletilla de cordero al horno de leña"...

  5. #5

    Joaquin1965

    El nombre yo creo que ya de por sí le aseguraba el triunfo. Qué crack el del furgón, qué tren de vida llevó el tío en brasil jajaja.

    Quitado esto del cachondeo, curioso lo de la entraña y un sitio al parecer muy recomendable.

    Abrazo y nos vemos en Huesca!

  6. #6

    Jeronimo

    Ante todo un abrazo para “la” Mari y “el” Bienve.
    Lo segundo me parece un precio genial por lo comido.
    Lo tercero, efectivamente las mongetes de Santa Pau están muy ricas y pueden competir y superar a las patatas, pruébalas un día en tortilla, te chuparás los dedos.
    Y cuarto……. si el cordero estaba tan bueno como dices no dudes de que era catalán, y si te has quedado corto en tus elogios, catalán de Girona.

  7. #7

    G-M.

    en respuesta a Joaquin1965
    Ver mensaje de Joaquin1965

    Jaja, sí, como que no le pega tener género uruguayo, pero algo comentó cuando se lo observé de que tenían algún ascendiente de allá.

    No la he nombrado pero la entraña estaba para morirse

    Aaaaaaaaaaaaa Huesca, brother!

    Abrazos

  8. #8

    G-M.

    en respuesta a Jeronimo
    Ver mensaje de Jeronimo

    Jaja, no, no, nos confirmó que era de Teruel.

    Les doy el abrazo de tu parte, seguro que se alegran.

    Macho, ¡me apunto lo de la totilla! Debe ser lareosenbicicleta

    Voy a "importar" toneladas de mongetes de ésas!!!!!!

  9. #9

    oscar4435

    Jodo , con el dioni , se ha reformao , a que no es ese dioni, este de chorrizo no tiene nada , buen precio.

  10. #10

    Abreunvinito

    pues ese me lo apunto por "en bajando" si hay otra vez Rumbo al Norte

  11. #11

    Otilio Haro

    Huele y sabe a pueblo, tío... Tu crees que uno que ha hecho la matanza de tres gorrinos sin llorar disfrutaría?

    Un abrazo

  12. #12

    G-M.

    en respuesta a oscar4435
    Ver mensaje de oscar4435

    Jajaja, más que chorizo, entraña...

    ;-)

  13. #13

    G-M.

    en respuesta a Abreunvinito
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    Apunta Diego, apunta!

  14. #14

    G-M.

    en respuesta a Otilio Haro
    Ver mensaje de Otilio Haro

    Como un gorrín, disfrutarías como un gorrín

    Abrazotes, Pequeño Quevedo

  15. #15

    Jotayb

    Compañero, has sabido transmitir muy bien en la crónica ese "mimo y calor" que se respira en este restaurante...pocos sitios quedan ya con esa atmósfera. Lo de "gastroduodenal" muy bueno ja,ja,ja

    Un abrazote.

  16. #16

    G-M.

    en respuesta a Jotayb
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    Gracias por permitirle alguna licencia a este humilde cronista...
    Jajaja
    Abrazotes

  17. #17

    Joan Thomas

    Después de leer tu comentario, si un dia bajo para Tarragona será visita obligada.
    Las mongetes de Santa Pau, son deliciosas, todavía tengo en casa unas cuantas que compré cuando estuve en el pueblo de Santa Pau.

    Un saludo

    Joan

  18. #18

    JoseRuiz

    Con ese nombre, pues no le habrán hecho bromas, ni "ná"

    Yo también me apunto a los findes de un día de vanguardia y otro tradicional.

  19. #19

    G-M.

    en respuesta a JoseRuiz
    Ver mensaje de JoseRuiz

    Venga!
    Montamos una nueva Peña?
    "Los Gastro-Alternantes"!
    XXXD

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