De vuelta

Nos gustó tanto el año pasado que no dudamos en reservar mesa para hoy mismo. Me ahorro la descripción del entorno y del restaurante y remito a los/las interesados/as a leer la valoración que me precede que salió también de mi puño y letra (o de mi teclado y ratón, cabría decir).

Hemos tomado raciones al centro (dos de cada para ocho adultos):

- Pan tostado: rico y, justamente por ello, me gusta hacer una alusión al mismo.

- Tellinas: frescas pero con exceso de majado de ajo. Neutralizaba su sabor.

- Champiñones a la plancha: buen tamaño, buen punto, idéntico acompañamiento al de las tellinas, pero aquí "molesta" menos.

- Mejillones al vapor: Buen tamaño y ausencia de condimentos (no los precisan).

- Berberechos: Jamás, de verdad, jamás los había visto de este calibre. Bueno sí. En Las Rejas (Manolo de la Osa), pero solo nos cayó uno por plato, jeje. Leve cocción al vapor para dejar en nuestro paladar un sabor marino para el recuerdo. 10

- Sepionets: diminutos, se comen de un solo bocado y ganan en sabor a la sepia. Ahora bien, si nos viesen aquellos de la campaña "pezqueñines no gracias", nos caería el pelo.

- Garibaldinos: colas de gamba rebozadas. Demasiado secas. Prescindible.

- Pescadito frito: Una delicia. Calibre considerable, frescura extrema y sin restos de aceite de la fritura: bacaladillas, palayas...

- Atún a la plancha: El escaso grosor de los filetes hacía presagiar lo peor: una sobrecocción del producto. Error: perfectamente cocinado y nuevamente de frescura notable.

- Gambas a la plancha: Calibre mediano (no se puede pedir más por ese precio: 45 €/kg) y punto perfecto de cocción. Me repito, ya sé, pero es que lo bordan. Tal vez un exceso de sal sobre la plancha que luego llega también al plato.

- Cigalas a la plancha: Calibre destacable de una verdadera delicia. Se parten transversalmente por la mitad para facilitar la cocción que nuevamente es perfecta (110 €/kg).

- Postres variados: flan de café, tiramisú, tarta de queso... Correctos.

Los niños han tomado unos fideos, huevos fritos y alguna que otra hamburguesa compartida. Nosotros hemos acompañado las viandas de cerveza, agua y dos botellas de bahía de Dénia (solamente nos cantan tres referencias de vino blanco).

El precio final resulta de dividir la cuenta entre los ocho adultos y cabe destacar nuevamente que sólamente las cigalas ya suponen un incremento de la misma de unos 14 €/pax. Esta comida en las zonas de costa de la provincia alcanza un precio de tres cifras, seguro.