Es que lo lógico, dado el temario "oficial", y con o sin formación reglada, es

Es que lo lógico, dado el temario "oficial", y con o sin formación reglada, es ponerse las pilas en autoformación continua. O sea, lo que tú mismo vas a hacer. De lo que además me alegro y te deseo suerte y que te sea productivo.

Lo que me preocupa es ese estado, marco mental/status quo dónde se encuentra normal que es una parte del oficio que no interesa y que ya se buscará la vida el escalafón más bajo de la cadena alimentaria o incluso el lavaplatos. Cuándo precisamente es el último recuerdo, el más reciente, que le queda en el paladar al comensal. Nadie quiere hacer postres, por lo visto no "mola".

Por ejemplo, alguien que siempre lo ha tenido como punto fuerte en sus menús degustación, es Begoña Rodrigo. Muchos otros de combinaciones con yogurt, frutos rojos frescos y bizcochos varios, no pasan. Por no comentar la jugada de tantos locales, de ticket inferior por supuesto, que disponen exclusivamente de flanes, budings y directamente de carta de marca de congelados.

En cuánto al programa, es incluso triste que comprobando que los tíos se habían "preparado" el concurso (es evidente que por ejemplo la propia prueba de "vending" la esperaban y se la habían preparado previamente), el tema de coberturas, postres, dulces e incluso fríos en general, lo tenían cogido con pinzas.

Antes no comenté, pero el famoso "canelón de aguacate", casi era la receta calcada del de "La cocina del tickets." (muy recomendable si tienes oportunidad de hacerte con un ejemplar). Tenía razón el chaval, que no tenía apenas mérito, y por otro lado tenía muy poca originalidad.