Interesante iniciativa: te envían un taxi para que te lleve a su local a tomar copas

No es nada inconfesable. El caso es que estabamos en Nueva Orleans un compañero y yo, y nos cruzamos con un par de marines americanos, por lo visto recien graduados y subidos de orgullo patrio. No recuerdo bien porqué pero uno de ellos me preguntó si estaba gozando de su maravilloso país, "haciéndome ver" lo muy superiores que eran a nosotros.
El caso es que la conversación derivó hacia la imposibilidad de que una persona era imposible que se bebiera dos "Hurricanes" (brebaje infernal de color anaranjado-rojizo que sirven en el Pat O'Brien y de elevada graduación alcohólica) y continuara desarrollando una actividad normal. Yo, que por aquel entonces era joven e inexperto, les reté haciéndole ver que era imposible para un marine americano pero no para nosotros. Mi compañero creyó que no saldríamos vivos de allí, pero los pájaros aquellos aceptaron el reto.
Una vez en el Pat O'Brien y después de pagar los taxis de vuelta, nos bebimos aquellos cócteles infernales, llevándose a los americanos a su casa en estado lamentable. A mi me afectó eliminando mi habitual timidez, y me acerqué a los dos pianos enfrentados y pedí a una de las chicas que me permitiera tocar algo (me encanta el jazz y desde siempre he aporreado el piano). El público empezó a jalear y me invitaron a otro de aquellos "Hurricanes". Hasta ahí recuerdo. Cuando desperté el local había cerrado y yo estaba apoyado sobre el piano, con las dos pianistas del local también dormidas, y junto a nosotros el encargado de llevarse a la gente a los taxis, también en estado lamentable.
PD. No había ninguna indicación de que hubiera cometido ninguna falta irreparable, salvo haber castigado los oidos de los pobres parroquianos del local.