Claro que tienes razón pero es lo que hay: agosto para nosotros por temas de trabajo (a pesar de precios más altos y más gente). De todas formas, la cena iba bien excepto por los tiempos, dado que el ambiente con la terraza tan agradable y el disfrute de un buen vino lo hacía muy pero que muy llevadero, pero ¡cataplum!: mosqueo. Si repetimos en Menorca, lo haremos en junio como Joan Thomas, sin duda.
Saludos