En la visita que hicimos nosotros el otoño pasado quedamos algo defraudados. Cenamos en su restaurante (planta alta), y su cocina no terminó de convencernos. Quizás la opción de tapeo sea mejor opción. Con el camarero tampoco tuvimos suerte. El que nos atendió era lo siguiente a pesado. Una pena que no disfrutáramos de la simpatía y profesionalidad de Vanesa.