Aquí en Valencia había algunos restaurantes que hacían la llamada "Cena de los Sentidos". Yo la última vez que fui acabé con un dolor de cabeza terrible del antifaz y me dije que nunca más, ya veremos si lo cumpliré ;-)
Enhorabuena por la experiencia y por haberla trasladado de forma tan gráfica en esta interesantísima crónica.
Saludos Jon Ander!!!