Honesta cocina a precios ajustados
Siguiendo la estela del inagotable emprendedor Pep Romany (Tossalet del Carme, Miguel Juan Tapes i Vins, La Naviera) repetimos visita a su nuevo proyecto: Pont Sec.
Ubicado en una casa de campo, en el kilómetro 1 del conocido Cami Vell de Gandía, que hace décadas albergo el originario Restaurante Pont Sec (bajo otra dirección) y posteriormente otros negocios con mayor o menor éxito (Bellavista, Provenzal, La Perla de Val, Serranos...), Pep Romany vuelve a los orígenes de la casa, basando ahora su apuesta en la cocina de la comarca, dándole un toque personal pero respetando las esencias y sabores tradicionales.
Para componer su cocina se surte de proveedores locales, tanto en cuanto a los productos del mar, de la próxima lonja, como del campo, preferentemente de agricultura ecológica. Por esta razón su carta varía de una semana a otra para adaptarla a lo que el mercado ofrece en cada momento.
Esta vuelta a los orígenes, tan presente actualmente en otros negocios, sin duda provocado por la actual coyuntura, no deja de tener su encanto. De ahí que en las pocas semanas de rodaje, este negocio haya tenido una muy buena acogida, ya que lo ajustado de sus precios permite abarcar mayor espectro de clientes.
La carta de vinos es reducida pero en acorde sintonía con la oferta gastronómica: 8 tintos (desde un acertado Ocean, de Fontanars, por 13,5 euros, hasta un Marques de Vargas por 32 euros) pasando por 5 blancos, 2 rosados y dos espumosos (Veuve Clicquot, por 49'5 euros, es el precio más alto de la carta).
Dos visitas (de 8 y 6 comensales) antes de escribir esta reseña permiten fundamentarla. Su fuerte esta en los arroces, magníficamente elaborados, tanto secos (destaca el De pulpo, tomates secos y ajos tiernos) como en caldero (por ejemplo el De conejo y caracoles). Pero no desmerecen ni los pescados (Bacalao en muselina de hinojo...) o las carnes (parrilladas con figatells y embutidos de Castells, las chuletitas, secreto de ibérico o los buenos cortes de lomo bajo). También son destacar los curiosos entrantes (Alcachofas con erizo, Boquerones en escabeche, Sepia al romescu, o Salteado de hierbas con huevo poche).
Postres, como el Crujiente de nísperos o el Hojaldre de turrón con chocolate caliente, pueden dar paso a una relajada sobremesa en la encantadora terraza o junto a su chimenea con un combinado que contenga una de sus más de 30 marcas de ginebra que "decoran" el rústico comedor.
Precio medio 25 euros.
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en respuesta a Egor N Ver mensaje de Egor N Hombre, que no me has molestado!! Es que el mismo comentario repetido 2 veces, y en plan reportaje... Tengo casa cerca y pasaré un día por ahí; y ya pondré un comentario; seguro que es un sitio que vale la pena. Disculpa tú, pero como hay tanto talibán... Un saludo cordial!!
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Sé a qué ubicación te refieres. Visité el Provenzal y la Perle de Val allí, però desconocía que el Pont Sec estuvo ahí originalmente. Yo lo recuerdo (y te hablo de los años 80) más alejado de Dénia, en un camino que iba entre "el camí de Gandia" y la carretera de Las Marinas. Era conocido por las cocas y el arroz al horno, me parece recordar.
Le deseo suerte al empresario en cuestión porqué me consta que no ha tenido demasiada con el Tossalet, la naviera... El Miguel Juan (si todavía es de él) sí parece funcionar.
En cuanto aquello de "muy buena acogida" no hay que lanzar las campanas al vuelo. Aquí en la zona somos un poco así. Que el empresario X (omito nombres) abre un local, todos como borregos allí, que el empresario Y (la competencia) abre otro, todos que vamos para allá. Lo difícil no es llegar, es mantenerse.
Enhorabuena por el comentario.
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en respuesta a Antoni_Alicante Ver mensaje de Antoni_Alicante Antoni-Alicante: suscribo íntegramente lo del perfil borreguil que tenemos en la zona de arropar cualquier iniciativa que parezca interesante. En principio no haría falta, ya que si en la propia WEB de Verema buscas Alicante salen más restaurantes recomendados en Denia y alrededores que en el resto de la provincia. Pero también es cierto que la estacionalidad de este lugar hace que muchos empresarios no aguanten los periodos del año de menos visitantes. Si ves mis comentarios anteriores (no opinaba desde hace dos/tres años) suelen tratarse de la Marina Alta, en donde resido, y siempre para bien, para que quien, como hago yo cuando viajo, quiera ir " a tiro hecho" y evitar un paellador o guiri-bar, tenga una descripción de lo que puede esperar en estos sitios antes de elegir. Si de paso damos crédito a quien con, ilusión y buen hacer, emprende un nuevo negocio pues mejor.
Efectivamente, Pont Sec estuvo en su segunda temporada en el camino que describes, cerca del Hotel Villas Amor. Pero antes de eso estuvo en el propio Cami Vell de Gandía. Algunos solo alcanzamos a recordarlo vagamente o por referencias de nuestros familiares.
(Disculpad el rollo, quizas deben hacerce en "privado")