Leyendo las críticas anteriores dan ganas de no ir.
Domingo a mediodía, lleno. 6 personas. El servicio impecable, por lo menos nuestro camarero estuvo todo el tiempo pendiente de nosotros. También el dueño (no recuerdo su nombre) se acercó varias veces. Nos dejamos aconsejar por el camarero (cosa que aconsejo, ellos saben lo mejor que pueden ofrecer), había varios platos con trufa. Para empezar, unas ostras y erizos deliciosos; ensaladilla rusa (si, una simple ensaladilla, pero con un sabor auténtico, sin espumas ni cosas raras), unos tomates con salazones (correctos, muy valenciano), un surtido de croquetas buenísimas (teníamos que haber pedido más), y unos huevos a baja temperatura con trufa simplemente deliciosos. Para mojar con pan y no parar. De segundo, un dentón en su punto, con todo el sabor del pescado fresco y bien cocinado. Un lomo alto Black Angus que aunque no lo probé personalmente tenía un aspecto magnífico. Unos espaghetti con boletus y pollo de corral sabrosísimos. Y por fin, un arroz de caza con trufa simplemente espectacular. Meloso, sabroso, con todo el aroma de la trufa y la caza, y un potente fondo sin sabores extraños, genial. Para repetir. Y los postres, bueno yo que personalmente no soy muy de dulces, también magníficos, sobre todo las milhojas de crema (también pedimos el foundant de chocolate y el tatin de manzanas, que les gustó a los dulceros). Vino, uno bobal que ya conocíamos de Pago de Tharsys, en su punto óptimo (buena calidad, y mejor precio). En fin poco más puedo decir. Un sitio para volver varias veces. Ah mención especial para los servicios que están en el sótano. Sólo puedo decir que nunca he visto algo parecido, un sitio super agradable y confortable, con música y una decoración espectacular. Dan ganas de quedarse allí, a tomar una copa después de la comida. Para concluir, con todo lo que comimos y bebimos, y a esta calidad, salimos a 47 euros por personas. Puede parecer caro, para lo que estamos acostumbrados en Valencia, pero la experiencia justifica ese precio (y lo digo porque en Madrid por menos de 50 euros no se come bien en ningún sitio). Enhorabuena, la cosa promete. Y quiero reiterar para concluir (además de la calidad) el buen servicio, hay que decirlo, estamos mal acostumbrados a que nos traten como borregos, y por eso se agradece que personas de tanta categoría te traten como si fueras de la familia. Volveremos sin duda, y ójala les vaya muy bien. (PD: me cuentan que el propietario fue el fundador de El Poblet en Denia. Ahora lo entiendo todo).

No sé que le ha encontrado a este restaurante. Hemos comido 4 personas hace poco y me ha decepcionado.
Pedimos una cañas para empezar, pues tienen un cartel diciendo que sus cañas son la leche o algo así. Traen 4 cañas no muy frías y con sabor a cerveza vieja.
De los demás platos, ensaladilla rusa con ciertos adornos, que no deja de ser una ensaladilla rusa. Nada del otro mundo.
Vieiras con cebolla, malísimas. No traen a vieira completa, sino un trocito cortado de forma cubica, sin sabor, todo lo demás es cebolla.
Pulpo - excelente
Chuletón - puede ser que hubiese estado mejor si lo hubiesen traído directamente de la plancha, pero cuando lo sirvieron estaba frío. De más está decir que a pesar de haberse interesado cómo queríamos el chuletón, lo han traído igual de cocción para todos.

Soy muy de alabar los restaurantes si son buenos, pero este me ha dejado hasta un poco triste por la gente que entraba por la decepción que se iban a llevar.

Bueno, he ido hoy a comer con mi esposa un poco amedrentado por los comentarios anteriores, precisamente porque los considero veraces y fundados según sus autores. En breve: dos cañas y 6 ostras gillardeau buenas (las he tomado mejores y mucho mejores) con dos copas de cava valenciano (como toca) una ración de ensaladilla de marisco MUY BUENA. Luego cada uno su plato: un corte de waygu kobe y un chuleton holstein, ambos excepcionales, con salsas, patatas fritas recién hechas. Botellita 3/8 matarromera. Dos cafes y copita de Baynes. 101.23 €
El servicio muy muy bueno; tranquilidad y se puede comer muy bien y más barato.Yo fui a las 13:20 (soy un poco guiri para los horarios) Cuando salimos estaba lleno. Comentarios de mesas colindantes muy gratos.
Volveré siempre que pueda

Es la segunda vez que acudo a este local, la primera no pudemos cenar ya que no funcionaba el extractor de la cocina y no se podía respirar..anoche lo volvimos a intentar.
Estuvimos un grupo de 10 amigos y coincido en todo lo anterior leído, lentitud, caos entre camareros...y lo peor, falta de educación y respeto hacia el cliente por parte de uno de los camareros que coincidió ser el hijo (grosero) del dueño. El resto del servicio a pesar de ir de cabeza, fueron muy amables.
Varios de mis amigos pidieron hamburguesa porque alguien que había ido, la habían recomendado, este chico dijo de manera inadecuada a una de las chicas que nos estábamos equivocando....que no sabía quien le podía haber dicho a ninguno de nosotros que la hamburguesa era plato estrella...pero que no era así. También pedimos pulpo, muy bueno, berberechos ( algo crudos y cerrados..) croquetas (correctas). Las picadas tardaron 30 minutos en salir, y los segundos más de 35 min. Los pescados bien, pero nada del otro del mundo...una pena porque en Denia lo hacen muy bien. Yo pedí un plato fuera de carta recomendado, huevo a bajá temperatura con trufa. Resulto ser huevo frito con patatas y trufa de verano, sin sabor y algo pasada...
En el momento de pedir la cuenta algunos hicieron pago en efectivo, otros en tarjeta. Mi tarjeta desapareció de mi vista 10 min. porque aprovechó para cobrar varias mesas, y ante mi reclamación la respuesta fue: " a ti que más te da si es de Pin" intolerable.

Mala experiencia, y desde luego nada recomendable.

Restaurante recien inaugurado, del mismo propietario y empresario del Poblet , y Peixes y brasses de Denia
Fuimos el sabado por la noche, El sitio esta decorado con gusto con una entrada acristalada que da a un espacio amplio con mesas y taburetes altos, La cocina a la vista a la izquierda
En el piso superior subiendo por una amplia escalera se encuentra el restaurante mas formal con mesas amplias y buena separacion entre ellas , con una pequeña barra para servir solo las bebidas, Decoracion bonita .
Pero a lo que vamos , teniendo en cuenta que acababan de inaugurar, intentare no ser muy critica, pero la sensacion fue de caos absoluto.
Nos sentamos a las 21,20 h. A los 20 minutos y tras levantarme a pedir las cartas , nos las trajeron , pedimos
Pulpo a la brasa como en peixes estaba bueno 13e. + iva
Huevos rotos , consistian en unas patatas a lo pobre con huevo y una lonchita jamon Na de Na 9'70 + iva
Ceviche de boquerones Eran unos boquerones en vinagre Estaban buenos , pero me esperaba algo mas creativo 11'50 + iva
Berberechos al ajillo Asi de simple berberechos al vapor con ajo y limon 10'80 + iva

Ahora a comentar el caos, Equivocaciones de platos dos veces trayendonos cosas que no habiamos pedido .Dos vinos elegidos en carta , no los tenian , nos trajeron el que ellos quisieron , como llevabamos mas de media hora y la comida se enfriaba nos lo bebimos
Cada vez que pedias pan, subian de la planta de abajo la panera, con solo dos panes, es decir que el pobre camarero se paso toda la noche subiendo y bajando la escalera.
Comentar que estaba lleno. Y habian tres o cuatro camereros un poco descoordinados,
Los tres primeros platos los sacaron practicamente a la vez pero el ultimo tardo casi 20 minutos en salir y reclamandolo
Conclusion Caos entre los camareros y cocina , quizas no pensaron que estaria todo tan lleno
La comida buena, pero pienso que en Valencia como este sitio , ya tenemos varios Me esperaba algo mas de creatividad en los platos
En fin restaurante de diseño muy bonito, en pleno centro de Valencia , al que yo le dare unos meses mas para que se afiance y a lo mejor volvere o no ......