Restaurante rústico a las afueras del pueblo. La carta de vinos es muy amplia, con mucha oferta de vinos de la zona (D.G. Benavente y Toro). La cocina es castellana elaborada. Ofrecen un menú de clásicos (carnes, asados, pimientos, etc.) y uno de temporada, en este caso de verano (platos frios y pescados). Nos decantamos por comer a la carta: atún marinado con mango, rollitos de cecina con foie, 1/4 de lechal asado, agua, 1 botella de Gran Colegiata Fariña del 98, 1 postre (crema de chocolate) y 1 café, todo buenísimo = 96 euros.

Decepcionante en conjunto. Instalaciones algo trasnochadas. Servicio amable , pero despistado, rutinario y sobre todo sin clase para un restaurante de estas características( con estrella). . Vajilla, cristalería, esos detalles abandonados o al menos no actualizadosCarta de vinos amplia , no existe atención al vino. Cocina tradicional, algo pesada y repetitiva, excesiva , cargante y sin nada destacable.Supongo que muchos diran que se "come bien", es subjetivo, en cualquier caso no entiendo la estrella.

Entorno muy bonito, algo rebuscado pero BIEN. Los salones y el interior en general están bastante bien. Ambiente castellano, un restaurante muy "nuestro".
Estuvimos un día que hubo mucha gente y tardaron un poquito en atendernos (mejor dicho en servirnos), pero el servicio es excelente.
La carta de vinos es bastante buena.
Pero sobre todo, destaca lo que tiene que destacar: la cocina.
Valoración general: MUY BUENA.
El precio es "contenido".

Excelente restaurante. Buen servicio y magnífica comida a precios contenidos. por desgracia siempre que he ido tenía que continuar ruta y no he podido comprobar el servcio del vino, pero la carta es correcta.

Buen lugar para disfrutar de la cocina de esos hermanos los tres platos que probé eran realmente buenos especialmente unas codornices rellenas solo fallaba algo el relleno pero la codorniz magistral. Los postres esta vez como en otras visitas no estan a la altura del lugar. Servicio un poco cansino. Pero es de lo mejor de la zona y la relación calidad precio es de 10. Buena bodega y excelente pan. Ir alli satisface.

Un gran restaurante, en el que como es tradicional todos los años visitamos al menos una vez. En nuestra ultima visita nos pareció un poco inferior, a lo que nos tenia acostumbrados, los canutillos de cecina estupendos, pero el cochinillo confitado y el lomo de ciervo no son lo que era, la relacion calidad/precio buena

Realmente fantastico.Menu degustación tradicinal a 45 euros exquisito.finca sobreño crianza 12 euros muy buen servicio y ambiente.Preciosa buhardilla para tomar café.Merece la pena la visita.Altamente recomendable.

Agradable restaurante en un buen entorno con distintos ambientes.Tomamos el menu degustacion de primavera ( 50 €;) con ocho platos ,el mejor el plato de mollejas y todo lo procedente del huerto que tienen al lado. Para maridar el menu elegimos un Viña San Roman (32€;). Cafe en la buardilla (recomendable)

Me encantó, sinceramente me esperaba otra cosa, pero lo que vi me gusto mucho más de lo que yo pensaba que era...no se si me explico...La comida excelente, pedí menú degustación y yo me quedé bien, pero la gente con la que iba pidió luego cordero (serán tragones!!) pero lo hicieron yo creo que por probarlo, por que ya llegaron con ganas de él,según decían les encantó. El comedor y restaurante en general, grandísimo y mu bonito. Bebimos Quinta Quietud, vino riquisimo, y el servicio del mismo tambien fue muy bueno.luego subimos a la huardilla a tomar "unos patxaranes", la idea es muy buena, pero a mi que me levanten de la mesa con el empacho que llevaba...pero en Lo Recomiendo de verdad!!!

Restaurante que no defrauda nunca, con una localización un tanto complicada de encontrar.
Cocina clásica rica y bien concebida, basándose en productos de la tierra de muy buena calidad, buscando su realce; raciones bastante grandes.
Perfectas carnes (solomillo con salsa de trufas negras, maravillosa paletilla con patatas asadas y pimentón, etc), y otros platos como cocochas de bacalao soasadas con milhojas de patata y tocino, magníficas. Baja algo el nivel en los postres, bastante subidos de precio en relación al resto de la carta, realmente ajustada.
Carta de vinos suficiente, muy extensa en Riberas y Riojas, bastante menos en otras zonas. Copas DiVino de buena calidad, y buen servicio del vino.
El servicio es verdaderamente destacable, muy amables y con detalles de verdaderos profesionales, además de que son un montón, y ninguno desmerece del nivel medio.
Ofrecen tomar el café en la buhardilla, si el cliente lo desea: háganlo, es una verdadera gozada.
Para la cocina les pondrí