Últimamente me estoy basando en internet para descubrir nuevos locales. La verdad es que con la cantidad de páginas y blogs que hay no es complicado (aunque sí lleva algo de tiempo) saber si un sitio vale la pena o no (básicamente cuando el 80% o más de las críticas son buenas). Tenía ganas de una hamburguesa algo gourmet y dudaba entre Pijama, B-Burg, Bacoa y alguna más. Me decidí por Santa Burg no sé bien bien porque, quizá porque un amigo vive cerca.

El local es alargado y bastante pequeño. Viernes noche y nos preguntan si tenemos reserva... entonces nos dicen que si nos ponemos en mesa habríamos de acabar en media hora pero que podemos estar en la barra, así que ya nos tienes subiéndonos a las sillas/taburetes (bastante cómodas).

Primero nos pedimos unas patatas caseras (4.50 eur, había suficiente para dos). Muy buenas, por encima de la media de una hamburguesería tipo. Probamos primero la Santa, Royal: 150 gr de buey, mayonesa, cebolla confitada, baco, tomate y lechuga. Muy sabrosa, no enorme pero ración correcta. Quizá el único pero que el pan no era muy consistente (el típico de hamburguesa, bueno y con sésamo).

Como mi amigo es un bruto quiso compartir otra, así que nos partimos una llamada De Luxe que llevaba 40 g de foie y cebolla caramelizada. A mi no me pareció tan buena, quizá por ser menos convencional o tal vez porque el foie no me emociona.

Para beber yo una clara de 33 cl (2.10 eur) y el colega una copa de vino (3.10) de tamaño generoso y servida en una copa más que aceptable. Lo único negativo que sólo tengan 1 tipo de vino blanco y otro de tinto.

El personal correcto, aunque para mi gusto estaba un poco "encima", aunque algo lógico si estás en la barra... Tienen tartas y macarons de postre. Para otra vez, con hamburguesa y media por barba ya está bien por hoy... Subí una foto a Instagram y el "Perfil" del local nos agradeció la visita.

En resumen, buenas hamburguesas (hay como 15 diferentes entre buey, pollo, cerdo y vegetarianas) con complementos muy acertados. Precio no barato pero tampoco exagerado y el hándicap de que el local es muy justo (además hacía bastante calor).