Sindrome de estocolmo
Joder de tanto ir, semi-obligatoriamente me va a acabar gustando y todo...es un sitio curioso, lo dicho de comidas de empresa que paga la tarjeta de la misma, de esos de tola vida, anclado en los años 80 ( que no es bueno ni malo ni regular, sino curioso), el único que conozco que esta en la primera planta de un piso de viviendas...(otra curiosidad). Comida , pos lo típico, cecina buena, lengua curada aceptable, y bacalao (sin d), que es la especialidad del local. De bebienda,harto de soportar este tipo de comidas, eligí el mejor (que no mas caro) vino de la carta de León un Don suero reserva que fue lo mejor de la comida...por favor si me lee algún responsable del lugar CAMBIA LAS SILLAS YA, sillas de paja del año 3 a.c con un cojin, a la hora tienes el culo cuadrado. Servicio correcto, mesas bien vestidas, camareros hieraticos...curioso, curioso, sere yo, señor, sere yo (le dijo judas al señor en la última cena).