Un dia diferente

Después de un fin de semana muy intenso de trabajo preparando una calçotada para unas 200 personas. Hicimos fiesta el lunes y nos fuimos a dar una vuelta por l’Escala . Siendo lunes era un poco complicado encontrar un restaurante abierto y más en el mes de febrero. Después de intentar en dos ya conocidos , me acorde que me habían hablado de este restaurante y por suerte parecía abierto.
El restaurante es bastante pequeño y la decoración bastante peculiar. Enseguida nos atendió el sr. Umberto y nos trajo la carta. No teníamos muy claro que pedir y nos dejamos aconsejar, fue un gran acierto. Primero nos trajeron un plato para compartir con una ensalada de tomate y queso que se llama “burrata”, nos comentaron que era un queso hecho con tres leches diferentes: vaca, cabra y oveja. El queso estaba buenísimo y incluso los tomates eran excepcionales para ser invierno. De segundo mi mujer comió unos macarrones con una salsa de tomate con un poco de picante, muy buenos y la pasta al dente. Yo comí unos espaguetis con almejas y albahaca, os puedo decir que por ahora es el mejor plato de pasta que he comido nunca, aluciné con la pasta, estaba perfecta y las almejas estaban al punto justo de cocción manteniendo todo el sabor del mar. De postre “como no” pedí tiramisú y mi mujer un rollo de galleta que en el interior había un tipo de crema, nos dijeron que era un postre típico de sicilia, muy bueno.
Para beber un vino italiano un Cabanon syrás 2007 y para los postres un moscato d’asti scanavino, espectacular. Como dije un día diferente y un gran restaurante siciliano. Muchas gracias a Umberto y al cocinero por su amabilidad. Seguro que volveremos este verano.