Agradable velada

No se si sera la tan manida crisis, o realmente sera una forma de celebrar el 20 aniversario del local, en cualquier caso, me acerque a cenar al local atraido por el menu degustación al precio de entonces, 35,52€ (menos de la mitad de lo que suele costar un menu degustaciónsin vino), por persona (incluido pan, café, y un mas que aceptable vino Peique viñas viejas).
El local esta enclavado en pleno barrio humedo muy cerca de la catedral, se trata de un restaurante peculiar, tres plantas de restuarante. Servicio atento, agradable y profesional (casí había empezado a pensar que este tipo de servicio había desaparecido, o al menos estaba en vias de extinción). Cristaleria Ridel incluso para el agua, mesas amplias bien distancias, y decoración de los comedores que predispone para el disfrute. Carta de vinos quiza algo corta, vinos leones, los "clasicos", alguna referencia extranjera pero sin demasiados riesgos, sevicio del vino bien.
Respecto al menu sin resultar ningun plato espectacular, todo rico. En resumen una gran RCP, y una estupenda oportunidad de conocer o descubrir un local "distinto" en León. Lastima que no mantengan el precio