Unos manchegos llevaban hablándome mucho tiempo de este restaurante por lo que en una parada en Albacete decidí probarlo siendo mayúscula la desilusión. Lo único que se salva fueron las setas que nos ofrecieron. El resto de platos, todos recomendados por el camarero cada cual más desastre. Parecía cómo sí quisieran dar salido al género que le quedaba. El vino de la tierra que nos ofrecieron estaba caliente y cuando pedimos enfriarlo nos pusieron cara de que no teníamos ni idea. La próxima vez volveré al Callejón de los gatos. Allí sis saben tratar bien a los extranjeros y piensan en el largo plazo.

Cena de sabado en Albacete , mesa para cuatro en este centrico restaurante . Decoración rústica y agradable , mesas algo juntas ( apuran el espacio entre mesas por la Feria ) , lleno total . Nos atiende amablemente Rodolfo ( propietario ) . No hay carta , nos la canta . Básicamente entrantes , carnes y pescados . Pedimos para compartir y nos decantamos por : calamar de potera salteado con tomate seco ( sabroso ) , ración de zamburiñas ( 12 ) , ración de jamón bellota ( cortado a mano , muy bueno , acompañado de pan tostado ) , tomate moruno ( muy bien aliñado con buen aceite y sal maldon ) , cazuela de trompetas con huevos fritos ( bueno pero algo pasado de sal ) y como plato principal compartimos un gran chuletón de buey , trinchado y servido con patatas fritas , perfecto . Materias primas de calidad .
Respecto al vino , nos dejamos aconsejar . Tomamos dos vinos de la zona : Capilla del Fraile 2005 ( Toledo , Syrah y Petit Verdot ) y Pago Florentino 2007 . Ambos buenos y servidos a buena temperatura . Buen coperio ( Riedel ) . No veo carta .
Para postre , compartimos tarta tres chocolates . Acabamos la cena con GT de Martin Millers y fever tree , bien preparados aunque servidos en vaso de tubo ( me gusta mas vaso ancho de cristal fino o buena copa ) y cobrados a 11 euros .
Salimos a 50 euros pax , incluyendo bebidas .
Para volver , buena opción en Albacete .