Si estando por la zona marbellí, uno se cansa de la fritura o de los abusos de la hostelería de Puerto Banús (sobre todo por el desequilibrio en la RCP), este restaurante es una excelente opción para deleitarse con la cocina vasca a un precio justo.
El restaurante tiene terraza y una animadisima barra donde poder picotear abundantemente.
EL comedor tiene a la vista, a traves de un cristal, la parrilla de carbón, que a mi particularmente ya me hizo salivar.
La decoración clasica norteña, con cuadros referentes a la playa de la Concha y otros bonitos paisajes donostiarras. Menaje y cristalería típica de asadores, mesas con suficiente separación, servicio atento y profesional y carta de vinos con 150 referencias con predominio de DOC Rioja de corte bastante clásico.
Empezamos con lomo (buen sabor aunque un poco fresco), correcto jamon iberico(nos toco de la contramaza), muy buena tortilla de patata hecha como si fuera una tortilla francesa. De platos contundentes solomillo (muy jugoso aunque un pelin pequeño) y dos buenas raciones de habitas con jamon. Solo un postre, sopa caliente de frambuesas con helado de vainilla. Cafes y chupitos de la casa. Cervezas a gogo y unas copas del vino de la casa. Todo 116 euros. Buena RCP y mas aun a un paso de Puerto Banús.