Lugar clásico y habitual, con un comedor señorial (martintxo) y una sidrería adosada.
Ir al Martintxo no lo hemos conseguido en las últimas tres ocasiones, a veces me he llegado a plantear si es un restaurante fantasma (que no para fantasmas, que no quiero un 2015 muy faltón).
Nos acomodan entonces en La Sidreria (misma cocina que el “ghost”).
El servicio es al galope, qué digo, al trote y no cochinero precisamente, sino más quijotesco incluso….ladran, luego cabalgamos….

Van acelerados, con urgencias, no te echan (al menos nosotros ni las mesas de alrededor lo sufrimos) pero todo es tan acelerado que puede darse con facilidad y excesiva cotidianidad, que te sirvan antes unas croquetas que no la bebida….

El servicio es de chiringuito, con profesionales agradables y con un jefe de sala (¿?) algo tenso, agobiado…seco…más “despachando” que atendiendo….
La comida está correcta, sin más… deambulando perdida… por barrios como diríamos, unos espárragos excelentes hermanados con unos chorizos sin sabor…
La cubertería, mantelería, loza… todo es de trazo grueso…café bueno por cierto, servido en tazas de propaganda…

En resumen, un buen lugar para ir con los amigos, con la “cuadrilla” a echarse unas risas, tontear con alguna kupela y poco más…
Eso sí, lleno siempre, con lo que para què mejorar en nada?... totalmente de acuerdo, seguramente es mi última visita, pues aunque es chiringuito, el precio es acorde a uno de primera línea de mar, lo que no es el caso…

Viajando a veces se hace difícil cambiar los horarios y las obligaciones. Así que, de nuevo en Pamplona, me acerco al MArtintxo. No consigo quitarme esa sensación de que estoy comiendo bien, pero no espectacularmente bien. Y ya van...tortilla de bacalao. En su punto, pero sin corazón (7). Yemas de esparragos con verduras (7) simplemente producto aquí. Chuletillas de cordero (6). Debemos dar más de sí y además, poca ración para 17€ sin IVA por ración. Un Inurrieta 400 (a 16€), poca profundidad, sin relevancia, bien sin más. Cafes y pacharán, aqui si a buen precio. Salimos a 48 por barba y aun no me he enterado...correcto, quizas si, mal comido, en absoluto...pero falto de emoción y con precios que ya no van acordes a los tiempos...quizás debamos plantearnos otras opciones en los alrededores de Iruña...

A pesar de haber reservado en el Martintxo nos dan la mesa en lan Sidreria. No funcionaba el otro local. Trato familiar tampoco especial. De primero una tortilla de bacalao, vamos a decir buena, sin grandes alardes, de segundo dos comensales, uno un rape negro, buena hechura, y el otro un "corderito lechal" a la brasa, no me satisfizo en absoluto, eso si la racion enorme.
De beber un Santa Cruz de Artazu 07, bien de precio.
La carta de vinos me llamo la atencion especialmente, buena variedad, solo 6 Rioja, bastante vino gallego tinto de Raul Perez, vinos de bastantes DO aunque solo fuesen uno o dos por zona. Blancos correctos y 3-4 champanes frances correctos. Los precios, en general de los vinos baratos muy cargados y de los medianos poco cargados. El servicio del vino mal. Lo descorcha y se mete el corcho al bolsillo. Que costumbrecita tenemos¡¡¡¡ si se tienen vinos especiales y buenos (los habia en la carta) no se pueden tener esos detalles. No tomamos postre. Si cafe. Al llegar la hora, nos echan sin disimulo. Asador agradable con buena materia prima sin mas consideraciones

Nueva visita. Esta vez cuatro espárragos cojonudos, buenísimos. Tortilla de bacalao. Bien. Una chuleta en su justo punto. Otazu reserva 2005. Arroz con leche muy bueno.Todo me parece siempre simplemente vendido, es decir, profesionalmente servido, pero sin emoción. No sé. Lo cierto es que la calidad es muy buena. El precio deben maniatarlo. 112 euros dos personas.

Visitado un dia de helada en Pamplona. Sidrería, no arriba.
Ensalada con unos buenos cogollos (delicioso el aceite) y un chuletón más que correcto. Servicio del vino (un Chivite negro) sin mayores virguerías.
Algo caro para el regusto que me dejó.

Restaurante con dos ambientes, uno tipo sidrería guipuzcoana (con kupelas para servirse la sidra, etc) y otro más formal. Más recomendable el primero. He estado 3 veces en 2 años y la materia prima en mariscos y pescados es excelente, así como el trato en la brasa. El servivicio del vino flojo, aunque los precios son contenidos. Recomendable