Al entrar y ver la parrilla encendida, nos dio la sensación de que era uno de los muchos restaurantes de Pagès que abundan por nuestra tierra, así que nos preparamos para comer algo de embutido y un poco de carne a la brasa. Nada más lejos de la realidad, uno de los cometidos de la parrilla, (aparte de los suyos propios), es el de dar el toque final a una serie de platos con muchas horas previas de elaboración.
Web: http://www.calxim.com/index.php?lang=es
Una web que no ofrece demasiada información.
Facilidad para aparcar:
Sin problemas, es fácil aparcar en la misma plaza.
Situación y Entorno exterior:
A medio camino de Vilafranca del Penedès y de Sant Sadurní d'Anoia, capitales del vino y del cava respectivamente, rodeado de viñas y de bodegas, un paraíso para los amantes del cava.
Entorno interior y Servicio de mesa:
Al llegar da la sensación de un típico restaurante de “pueblo”, pero en el que al entrar vas notando detalles que te van indicando que este restaurante es algo diferente, correcta separación de mesas adecuadamente vestidas y cristalería Riedel.
Trato del personal:
Muy agradable, atento y profesional, creo que nos atendió uno de los hermanos propietarios que muy amablemente nos explico la elaboración de algunos de los platos.
Especialidades:
Tradicional catalana, especialmente basada en la “brasa” con toques de modernidad.
Claridad carta:
Clara y apetecible, la verdad es que representaba un problema ya que todos los platos nos apetecían, “im”presionante la carta de cavas.
Platos probados y precio:
Dos personas, en esta ocasión nos decantamos por platos de la carta.
Snacks:
Una aceitunas para la espera.
Platos:
12,75 €.- Uno de, Calçots a la brasa. (Los presentan ya pelados y listos para comer, particularmente me gustan más los normales pero no estaba mal.)
3,25 €.- Media ración de, Alcachofas a la brasa. (Muy buenas.)
6,75 €.- Media ración de, Trinchat. Potente, menos mal que pedimos media
21,50 €.- Espalda de cabrito. (Espectacular, asado al horno durante doce horas y terminado con un toque de brasa.)
14,50 €.- Cansalada confitada. (Una alegría para el colesterol pero buenísima, misma elaboración que el cabrito.)
Y de postre:
5,90 €.- Una de, Tarta tatin con helado de vainilla de Tahití (creo).
Bebidas:
18,80 €.- Una de Cava Llopart Brut Nature, perfecto tanto en temperatura como en servicio.
3,00 €.- Dos cafés.
1,25 €.- Pan.
Pan:
1,25 €.- Dos rebanadas de Pan tostado con tomate.
Cuenta:
87,70 €.- Dos personas (Clara y sin sorpresas).
Relación calidad precio:
Muy bueno.
Recomendable:
Sin ningún género de duda.
Comentario:
De nuevo la ayuda de los amigos de Verema, en este caso una llamada telefónica a un amigo forero, (Gràcies Pau), nos ha servido para conocer un muy buen restaurante y disfrutar de una buena comida en un zona totalmente desconocida para nosotros.
No acostumbro a valorar el servicio de vino salvo en restaurantes de “alta gama”, pero en Cal Xim aparte de una temperatura adecuada del cava, buena cristalería y un servicio adecuado pero de esos que no te agobian, he encontrado una de las cartas de cava más completas que podría haber llegado a imaginar, lo que como buen amante y consumidor de cava me ha llegado al corazón.