El Beethoven es, sin duda, de lo mejor que se puede encontrar en Tudela y sus alrededores. Alta calidad gastronómica.

Una buena elección para comer en un entorno clásico, tranquilo y distinguido.

Restaurante que al la entrada pude parecer clasico, pero para nada. Llevamos 2 vinos de sobaquillo que al minuto ya estaban a temperatura y en cubitera un blanco y decantado el segundo. La atención de la dueña y del jefe de sala impecable con cambio de copas, por cierto muy buenas, y con servicio del vino impecable. Pero lo que hay que destacar del sitio es la cocina, unas verduras impecables esparragos, alcachofas, habitas, y más que no rescuerdo de unos entrantes de verduras que quitaban el sentido para terminar yo una pintada con foie de pato que estaba de rechupete. No se si es caro o no, me invitarón, aunque supongo que no será barato ni mucho menos pero merece la pena tanto por el servicio del vino como por la cocina, la carta de vinos pues muy amplia en vinos navarros y después riojas y riberas, alguna referencia más del resto de España pero pocas.