Una cena exquisita

Hacia cinco años que no habíamos estado en este excelente restaurante de Girona, galardonado con una estrella Michelin y dos soles Repsol y ya era tiempo de volver a visitarle, así que reservamos previamente para ir a cenar el sábado 11 de julio a las 20h30.

Fuimos recibidos por el jefe de sala, Eduard Massana, que no es otro que el hijo del Chef, quien nos acompañó a la que iba a ser nuestra mesa esa noche, y que como el resto de ellas, era grande, estaba muy bien vestida, con buena vajilla, buenos cubiertos y buenas copas Schott y perfectamente separada del resto. La sala, de diseño, es muy acogedora y transmite serenidad. Esa noche solo quedó libre una mesa.

Tanto el servicio de sala como el del vino fueron perfectos. Poseen una bodega con mas de 300 referencias.

En la cocina el Chef Pere Massana sigue haciendo maravillas para deleitar las papilas gustativas de los comensales con su cocina creativa, innovadora, fruto de la cocina tradicional catalana, elaborada con productos de temporada y de proximidad de primera calidad.                                                                                                                                                                         

Su esposa Anna Roger, ya no está en el restaurante, ahora dirige la tienda de delicatessen y productos gourmet que poseen en el barrio antiguo de Girona.

Tras escuchar las sugerencias del día, y ojear el menú degustación y la carta, optamos por esta última

Empezamos con tres aperitivos : Macaron Waldorff,  Mini cogombres, crema de salmó i el seu caviar ( Mini pepinos, crema de salmón y su caviar),  Musclos marinats, llima i coriandre (Mejillones macerados, lima y cilantro). Los tres excelentes, con una mención especial para los mejillones, un clásico en los aperitivos de Pere Massana.

Seguimos, compartiendo dos entrantes :

Ceps, gambes i tòfona, ceps en carpaccio, gamba marinada, tofòna d'estiu i vinagreta de pinyons ( Boletus, gambas i trufa, boletus en carpaccio, gamba marinada, trufa blanca de verano y vinagreta de piñones). Servida cada media ración en plato individual. Una verdadera delicatessen. Riquísimo. 

Como pequeña nota discordante decir que apareció un corto cabello en el plato de MC. Tras las excusas del Jefe de Sala y de la camarera que nos había servido el plato, no nos lo cobraron.

Ous de reig, patata i ou poché (Oronja, patata y huevo poché) Sugerencia del dia. servido está vez en un solo plato en medio de la mesa por la dificultad de presentarlo en dos platos distintos. Puro producto de primera calidad perfectamente cocinado, Un "plaisir des dieux".

(Las fotos de los siguientes platos pueden verse en el primer comentario)

De segundo ambos escogimos el mismo plato :

Llobregant blau del pais, el seu suquet, crema de patata, carxofes i rossinyols  (Bogavante azul del país , su “suquet”, crema de patata, alcachofas y rebozuelos). Sin palabras, un pla-ta-zo. Uno de esos platos que no se olvidan.

El pan que acompaño la cena fue muy bueno.

Como postres tomamos :

Coco, guacamole de plàtan (Coco, guacamole de plátano)

Yuzu, fruites tropicals i flor d'hibiscus (Yuzu, frutas tropicales y flor de hibiscus)

Ambos muy refrescantes y sabrosos. Deliciosos.

Para beber, tomamos una botella de 1/2 l de agua mineral y un viejo conocido, siempre agradable de volver a encontrar, un blanco crianza Masia Carreras 2017 DO Empordà Celler Marti i Fabra, Sant Climent Sescebes, Cepajes : 10 % Garnatxa blanca, 10% Picapoll, 40 % Carinyena blanca, 30 % Carinyena roja, 10 % Garnatxa roja. Envejecido durante 12 meses en barricas de roble francés. Vino de color dorado intenso, potente, fresco, con muy buena acidez, redondo, sabroso, muy largo en boca. Maridó perfectamente con la cena.

Finalizamos con dos buenos cafés y unos originales petits fours

La cuenta ascendió a 98 € / persona. Muy buena RCP. Una excelente cena, un homenaje. Pere Massana es un maestro de los fogones. Tuvimos ocasión de poder hablar tranquilamente con él durante y al final de la cena sobre cocina y el panorama actual de la restauración y en sus palabras transmite ilusión, esperanza y seguridad y como siempre amabilidad y simpatía. Sin ninguna duda volveremos en cuanto se presente la ocasión. Muy recomendable