estuvimos el sábado en la Gavina.
Situación inmejorable junto al paseo maritímo.
No atendieron inmjorablemente. La mesa, al lado de las ventanas, nos dejavan ver los barcos amarrados.
Día de sol, ambiente y muy buen trato nos invitaban a pasar un dia maravilloso.
De primero pedimos unos calamacitos salteados y una croquetas de marisco.
Los calamares insuperables. Pasados rapidamente por la paella, encebollados y con ajo tierno, fueron una irresistible tentación. Mojamos el plato hasta que se nos acabó el pan.
De segundo pedimos la paella de marisco. Muy buena. Ración generosa y con un muy buen sabor que le daba el caldo de pescado.
Todo esto lo regamos con el vino que nos aconsejó el maitre. Un gewustraminer de somontano. Fantástico. A medida que iba cogiendo frio en la cubitera iba superándose.
La guindilla la dejamos para el final. Valentí, el maitre, nos aconsejó hacer un variado de postres. Nos trajo tarta sacher, tarta de limón, hojaldre de crema pastelera ... Como nos enseñaron en casa, no debemos dejar nada! Claro error. El hecho de querer probarlos todos, y cada cual mas rico, hizo que salíeramos del restaurante derechos a dormir la siesta, jajaja. Regamos los postres con un vi de gel de gramona. Ya lo conocíamos, así que nos pareció una buena manera de maridar el postre.
El precio muy correcto por todo lo que disfrutemos en la Gavina.
Una de las conclusiones que sacamos del restaurante es dejarse guiar por el maitre. Su buen hacer y su encantador trato es la mejor opción posible para que la comida se vuelva en una maravillosa experiencia gastronómica.

Hace años que vamos a este restaurante, aunque también es cierto que hacía quizás un par de años que no habíamos vuelto. (La valoración de Rania - más abajo - también es nuestra).

Volvimos ayer, lo encontramos más caro que de costumbre, pero sobretodo, supongo que lo encontramos caro porque el servicio fué muy regular. Ni siquiera nos pusieron cubiertos de pescado - tuvimos que pedirlos nootros - habiendo pedido una graellada de pescado de 30 euretes.
En fin, no me voy a ir por las ramas, porque fueron muchos detalles, por ejemplo, a mi hija pequeña, que es mayor de edad, y estudia enología, nole pusieron copa de vino (Y pedimos un vino de precio medio alto en referencia a la carta), cuando la pedidos se la pusieron, cuando iban a servir el vino, pedimos que se lo sirvieran primero a ella, ni siquiera nos escucharon, sirvieron a todos menos a ella, vamos, que no le pusieron vino en la copa.
En fin, el pecado no estaba en sumejor día, las cigalas no eran muy frescas y así 100 cosas, todo bastante crudo. Lo siento, pero nos salió a 40 euros por persona incluyendo niños, y no me pareció que saliéramos nada satisfechos.
Eso si, lleno.
Quizás solo fué este día, pero recuerdo muchos días mejores en este restaurante.

Un servicio estupendo y la comida incluso mejor. No dejéis de probar las cigalas a la plancha. Con sal y un poco de pimienta, tienen un sabor muy especial. El arrocito de marisco excepcional. Fresco, ligero, sabroso, meloso... una maravilla.

Repetiremos.

Segunda visita a este maginifico restaurante, tomamos el menu gastronomico que se compone en 4 platos, carpacio de bacalao, habitas con chipironcitos, unas cigalas flambeadas, y para acabar de rematar un delicioso rape al horno, postres a elegir, yo personalmente un mil hojas de crema, todo regado con un Somontano Ines de Monclus Chardonay Gewurtraminer a una temperatura perfecta, Estuvimos en el salon superior ubicado en la primera planta con unas vistas magnificas sobre el puerto de cambrils. Servicio perfecto

Fui solo a mediodia y pedí el entremes de pescado y marisco como plato único, la calidad de la materia muy justita y pequeña, tipo medio bajo, el local esta bien y promete mucho más de lo que en realidad es. el servicio bueno, el vino un verdejo blanco de rueda servido de forma correcta.
Pasable sin más en Cambrils tiene por lo menos cuatro o cinco restaurantes muchísmo mejores.

Con una situación magnífica en el paseo marítimo de Cambrils , frente al mar, nos atendió muy bién la jefa de sala sra. Pepita, q nos recomendó los entreseses de pescado y de marisco (frios y calientes), acompañados de salsa de romesco y all-i-oli, y cosa exquisita tanto de fescura como de paladar. Los postres caseros de tarta de manzana y de hojaldre no han de perderse por su exquisitez. El vino, un Blanc Pescador, en copas altas y cubitera, maridó perfectamente toda la comida. La RCP muy buena. Recomendado a todos los foreros q les guste el buen pescado, pq con los entremeses (4 platos) ya es más q suficiente. Hay q reservar en domingo al tel. 977361731.

Yo no se pq decis q la carta esta bien teniendo en cuenta la zona, estamos en una d las mejores zones vinicolas del mundo, Priorat, Terra Alta, Penedés... Excelente pesacado, muy buen trato y una factura un poco subidita, pero merece la pena.

Excelente, pescados y mariscos, muy frescos y muy bien cocinados
Excelente carta de vinos, Tomamos un Viña Ardanza Reserva del 99 a un temperatura perfecta, Servicio Atento
Recomiendo los postres caseros, como el mil hojas de crema y el crujent de avella.
Repetiremos

Excelente local, familiar, sin pretensiones. Limpísimo. Trato amable, cordial y exquisito.
Materia prima muy buena, hemos ido muchas veces. Precio, no puedo deciros, siempre voy invitada.
Pescado y marisco exquisito.
Carta de vinos más floja, pero aceptable para la zona.