Besalú cuenta con un conjunto histórico artístico medieval muy bien conservado, el acceso al núcleo a través del puente su bien conservado puente sobre el rio con las torres que cerraban el acceso a la población y los baños judios son unos de los principales atractivos para el turismo, muchas tiendas de artesania y locales de restauración invitan al turista a hacer compras o sentarse en una de las terrazas de los muchos bares y restaurantes para descansar y reponer fuerzas.

Nosotros recalamos en Nox Arrosseria tras haber reservado mesa en la terraza que ocupa en la gran plaza central donde está la Iglesia del Monasterio benedictino de Sant Pere fundada en el año 977. El nombre del establecimiento deja claro que su especialidad son los arroces y concretamente en este caso los alicantinos, nosotros nos decidimos por el socorrido arrrós del señoret, arroz insulso sin ningún sabor con los mejillones super pasados de cocción, también las gambas congeladas, por cierto las mismas que nos sirvieron al ajillo,el calamar duro y la sepia testimonial, todo ello mal repartido en la paelllera, todo con una cocción previa puesto de golpe en la misma repartido o dejado caer por zonas. Dejamos más de la mitad.

Para esperar la paella pedimos una patatas bravas y unas gambas al ajillo, la foto de las gambas la hice cuando ya habíamos comido tres o cuatro piezas, pasaron sin pena ni gloria.

Para beber un verdejo, Thayra que nos lo sirvieron muy frio, y entró de maravilla

Terminamos con dos cafés.

Un lugar donde se sirven arroces para "guiris" de todas las nacionalidades y para algún despistado como yo, posiblemente hubiéramos comido mejor y más barato en el bufet libre que hay a la entrada de la población tras cruzar el puente, con una magnífica terraza con frondosos arboles donde había cola de gente esperando tanto antes de comer nosotros como después de hacerlo