Visita rápida para probar un ramen que alguna compañera experta me había recomendado. El local merece la pena por su comodidad y decoración asiática. Resulta curioso y acogedor , aunque merece la pena alejarse de la barra para evitar olores. El trato es amable, rápido y eficiente. No tengo una gran experiencia en este plato japonés , pero de los que he probado ha sido uno de los mejores y el mejor en RCP. Ofrecen varios distintos , cuatro o cinco. Yo elegí el Koji miso, un intermedio con sabores más intensos. Cerdo, un caldo de horas de cocción potente , pero a la vez suave y equilibrado , verduras, algas, cebolleta, texturas, me gustó , pero me llenó enseguida. Antes había probado un Baoh Taku de salmón . Un bocadillito de salmón con huevo de codorniz, un poco soso, pero gustoso y con hambre ya se sabe. Si me gustara mucho el ramén y viviera en Bilbao no me lo perdería . Por cierto el ramen , 11 euros