Maider Larrañaga dirige con maestría un restaurante que se ha convertido en un referente gastronómico y sobre todo enológico. Maider con su profesionalidad, simpatía y rigor aconseja y sugiere sobre el vino de una forma que todos disfrutamos como clientes y que se aleja de la soberbia , estupidez e infundado narcisismo de muchos profesionales de los que prefiero no hablar. Un asesoramiento enológico divertido , relajado con criterio , interactivo con la seguridad que le otorga su conocimiento y su espléndidad bodega que ella, ha ido construyendo. El caserío esta apartado, pero es cálido y acogedor. Se come muy bien y a precios diría que económicos: , odoloste, croquetas, alcachofas con foie y salmón, bacalaos, carnes, callos, pantagruélicos postres, Entras contento y sales más  contento..pleno..Una visita ineludible, por todo , pero sobre todo por Maider¡¡¡

Mas que relataros una comida, os relatare un fin de semana gastronómico, este restaurante, además tiene habitaciones, solo seis, super chulas, ya que es también se dedica al agroturismo, es un bonito caserío reformado, cerca de Mondragón, donde Maider Larrañaga dirige el cotarro del vino y sala, junto un equipo de gente, profesional, y con experiencia.
Vamos al lio, reunión de amigos, amantes del buen comer y mejor beber, de Cantabria, Vitoria, Bilbao, dos madrileños, y un chileno residente en la bella Cantabria, todos ellos amantes del vino.
Y este es el principal motivo por el que nos juntamos, Maider tiene una carta con las mejores referencias que puedas imaginarte, de todo, y to bueno, luego os dejare alguna foto de los vinos.
Nos juntamos a eso de la una del mediodía del sábado, llevar las cosas a la habitación, y empezar a beber buen vino, nos pusimos en sus sabias manos.
Para comer, decir que la cocina se basa en el producto y la cocina vasca, por lo tanto cocina sustanciosa, que invita a beber.
Empezamos con unas tostadas de rica ensaladilla rusa, rica cecina, con piñones y su aceite rico.
Primer plato individual, un pudin salado, de setas, con un rico jugo.
Segundo individual, ensalada de bacalao, bien currada, cebolla encurtida, buen mézclum, pilpil, rica.
Volvemos a compartir, ricos fritos, croquetas, gambas orly, caseras, cremosas las croquetas, y crujiente las gambas orly, perfecto.
Individual, merluza rellena de txangurro, buen punto, sabrosa, ningún pero.
Chuletón para compartir, buen punto, buen color, sabor suave, y rica textura.
De postre tabla de quesos, de nivel, con nueces y membrillo y por último unas tejas con helado, lo dicho cocina tradicional, bien hecha.
Para beber, lo que quisimos de cantidad, y todo de categoría, dejo fotos los postres con malus mama, y otro dulce de txakoli, también de gran nivel.
Bueno ahora vendría que os comentase el precio, pero es que esto seguía …
Después de una sobremesa, que algunos mantuvimos hasta después de la cena, bueno en la sobremesa, no sé ni los gin-tonis que tome, por cierto de una ginebra propia del local, que estaba bien buena, pues eso, ahora la cena.
Huevos con patatas y longaniza casera, todo nevado de trufa negra, y de postre tabla de quesos, y más rico vino …
Y mas sobremesa, el que quería vino, más vino, yo ni se los gin-tonics, claro, como para no quedarse a dormir, ya os digo, fue un no parar, desde la una del mediodía, en mi caso hasta, ni me acuerdo la hora, y que guapo, tener la habitación tan cerca.
A la mañana siguiente, desayuno, en plan buffet, de calidad, reconozco que solo bebí agua y agua, como tendría el cuerpo para no desayunar.
Total a pagar, 250€ persona, aperitivo antes de comer, comida, sobremesa, cena, sobremesa, habitación y desayuno, os lo garantizo, por las referencias de vino, la cantidad y el magnifico trato recibido por Maider y su equipo, un precio de amigo.
Solo una pega, bueno dos, la primera, que el ultimo trayecto en coche, eso sí, corto, es pelín estrecho, y que con la caraja, no se nos ocurrió dejar propina, un fallo a remediar en la próxima.
Un restaurante a recomendar se come bien y se bebe sobresaliente, y además si quieras conocer la zona, las habitaciones están muy bien, gran amplitud, limpieza y vistas.