Espléndido restaurante, encabezado por un cocinero joven pero bastante rodado. Estuve este fin de semana, el servicio impecable, la comida excelente, con productos de la tierra dándoles un trato innovador. La carta de vinos muy interesante con precios razonables.

Restaurante de autor, diseño moderno, cocina vista.
Decoración un tanto fría.
La comida es buena, pero sin estridencias. Un tanto caro. (60€ con vino).
Probaré otros en la zona antes de repetir.