Gratificante

Y aquí estaba yo de vuelta, dos años (por lo menos) depués a este mítico restaurante de la provincia. El recuerdo sigue imperturbable, clásico comedor con pilares de marmol, etc. Y luego el zulo de fumadores (como lo denominaba mi padre), con algo más de luz y donde decidí sentarme.

Dos personas a disfrutar, ocupación del restaurante total 3 mesas. El Cenador de Amos completo, por lo que mí amiga tuvo que dejarlo para otra ocasión.

La bienvenida, con la selección de aceite y 4 porciones de pan. Copita de champagne para ir haciendo el paladar mientras miras la carta. Comimos de carta, porque hay dos menús y uno es muy corto y el otro nos parecío demasiado largo para una cena.

Nos traen un aperitivo, una crema de queso con pato demsigado (si mal no recuerdo), muy correcto. Comenzaba bien la historia.

Para beber, mí amiga es de burbuja y después de preguntar sí estabamos preparados para gastar 1600 o 2300€ en una botella de champagne decidí poner los pies en la tierra y pedir una botella de G.H. Mumm (48€, cerca de mi tope por botella). Detalle a indicar, como estaba aún un poco caliente nos fueron regando con el rosado de bienvenida. En cuánto a su sevicio, perfecto. Bien descorchado, bien servido, bien enfriado y en ningún momento falto un cl en nuestras copas.

De comer, que aquí se viene a comer y a disfrutar!! Compartimos lo siguiente:

- Calamar a la plancha con tempura de verdura. Estaba muy bien preparado, buen sabor y buena textura.

- Setas de temporada. Constaba de tres especies; lengua de blanca, no se que de violetas y la otra no recuerdo (soy un desastre). Iban a la plancha, cortadas muy finas y con un caldo de levadura. Si hubiesen sido con ajo y perejil mucho mejor, pero hay que decir que estaban muy buenas.

De segundo:

- Dorada a la plancha; no tenia para nada mal aspecto y viendo la velocidad a la que desapareció creo que mala no estaba.

- Carrilleras. Hacia mucho que no comía yo fuera de casa carrilleras y me anime. Estaban muy bien de sabor pero quizás algo duras. Ojo, no menosprecio el plato, porque como bien indico de sabor excelente.

Llegados al postre, nos indican que hay una variedad de quesos a probar .... Me lo pense y repense (estabamos a explotar) para al final declinar la oferta y meterme por el pecho un yogur de tapioca, con frambuesas. Pense, algo ligerito para el cuerpo... de ligero poco pero hacía tanto que no disfrutaba de un postre sin chocolate como en esta situación.

Completamos la cena con dos cafes y maldiciendo no poder beber algun Brandy o Cogñac e la carta, muy buenos los precios. En fina, la proxima vez me voy en taxi desde Noja o me cojo un hotel enfrente.

El total de la nota fueron 140 y pico€

  1. #1

    Kintiman

    Es lo que tienen estos restaurantes un poco apartados para el tema de cenas , que al final te impiden disfrutar al máximo por si te cogen los hombres de verde, jeje.

  2. #2

    Emili

    Jolín con tu amiga, menudo pico tiene para el champagne.

    Saludos.

  3. #3

    Miguelbc

    en respuesta a Kintiman
    Ver mensaje de Kintiman

    Es lo suyo, acabar cada comida/cena con una tónica mezclada o similar. Pero bueno, en otra ocasión!

  4. #4

    Miguelbc

    en respuesta a Emili
    Ver mensaje de Emili

    No mujer, es con fondo jocoso. Ni tenemos el dinero, ni los conocimientos ni el paladar necesario para degustar esas cosas.

    Yo pienso que gastar como mucho 50€ en una botella ya es demasiado...

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar