Parece que por fin la zona de la marina cobra vida en base a locales de copas y restaurantes que han hecho que las noches de Valencia tengan una zona de encuentro al menos en época veraniega.
Andan todos con buena asistencia, algunos ofrecen opción de música en directo. En nuestro caso es un local que dispone de restaurante, zona de terraza y en el piso superior terraza al aire libre para copas.

Hay que destacar la amabilidad del servicio desde la encargada de sala hasta el último trabajador. Habiamos reservado en terraza pero allí entraron dudas planteamos cambiar al restaurante, luego a la terraza otra vez; y ya sentados y pidiendo, nos aconsejan colocar una segunda mesa para estar más anchos.
Entre todo ello nos oyen hablar de que estamos de cumpleaños y además de felicitarla en vivo y en directo a través del animador, traen por cortesía de la casa, una ración de tarta de queso casera con velas al final de la cena. Hay vecinos que debían aprender.
Zona de terraza con copas bastante llena, comedor y zona de terraza para cenar a medio gas. Las vistas son un atractivo más.

En la terraza, mesas y sillas cómodas, buen cambio de platos y cubiertos; cuberteria y copas correctas, buen servicio de vino, buena cadencia de platos.
Carta de comidas con arroces interesantes (hoy no, ¡mañana!), hay entrantes frios y calientes a precios comedidos (gamba roja a 6€ unidad) y varios pescados (sobre 15-16€) y carnes.
Carta de vinos con más que suficiente para elegir con predominio de cavas valencianos con precios dispares: Tantum Ergo rosé 44€, y el chardonnay 24.50€.

Cuatro para cenar y celebrar onomástica:
Al centro:
. calamares a la andaluza: calamarcitos rebozados y fritos: bien de sabor, buen rebozado, nada aceitoso. Cumple bien (10€).
. tellinas de playa a la brasa: tamaño superior, bien hechas, buen punto de condimento y sal (14€). Notable.
. quesitos fritos con salsa de frutos rojos del bosque: más aparente que interesante (8€).
Principal individual:
. entrecotte vacum a la brasa: buen tamaño, bien de sabor, bien de brasa. Acompañan patatas a lo pobre y 3 pimientos de Padrón.
. taco de atún rojo: buen tamaño, al punto, bien de sabor y textura.
. calamar de playa a la brasa: tamaño correcto, bien resuelto.
. dorada de playa a la sal: servida limpia, muy buen sabor.
Postres: presumen de todos caseros y así lo parecen:
. tarta de 3 chocolates: muy densa, algo sobrada de leche condensada
. 2 sorbetes de frambuesas: ricos y refrescantes.
Pata beber:
. 2 mojitos bien preparados como aperitivos
. 2 agua grandes
. Colección Sommos Gewürztraminer 2015 a petición femenina.
La presentación y tipo de cocina no ganaría master chef, pero es un buen producto que cumple bien.
No se cobró extra por el pan ni servicio y se trajo por cortesía cuencos con tomate troceado y otro, creo recordar, con mahonesa.

Sin cafés y con descuento para tomar una copa (a fijo 5€) en la terraza superior que aprovechamos y desde donde las vistas aún mejoran más, aunque estábamos bastante solos lo cual se agradece por mi parte.
A todo ésto y de forma constante preguntando como va todo, que tal la cena, están a gusto... Asombroso en este tipo de sitios,

¿Solo postureo? Pues parece que no, aunque también.

-Dónde quieres celebrar tu cumple, hija?
-En el mar, en el mar, en el mar!
-Pues a Vinícolas, a Vinícolas, a Vinícolas!
-Más cerca del mar, más cerca del mar, más cerca del mar!

No hubo manera de convencerla que a Vini, con lo que a mí me gusta… Pero al menos logré evitar los de la Malvarrosa.

Fui por la explanada de Veles e Vents y vi uno nuevo (lleva dos meses), de esos que son restaurante-lounge, que ocupaba la posición más cercana al mar, en el mismo vértice que forma esa explanada con la playa a un lado y la ría a otro. Y reservé en la mesa más cercana al gran azul.

Guapo garito, modernote, con grandes cristaleras-ventanales replegables que conforman una zona semi-cubierta (la que elegí), otra zona cubierta y otra de terraza.

Carta mediterránea a tope con toquecillos leves de actualidad.

Tomamos:

• Ensaladilla rusa
• Boquerones marinados agridulces
• Croquetas de marisco
• Tellinas
• Fideuá del senyoret

Coooooorrrrecto todo, superando expectativas (si bien éstas eran realmente bajas). A mi hija le encantó, y se trataba de eso, así que misión cumplida.

Bebimos un cava que no recuerdo, de los medios.

Yo me fui moderadamente satisfecho… Pero desde nuestra privilegiada ubicación se divisaba perfectamente el singular habitáculo de Vinícolas, y miraba hacia allí más que hacia el mar, con una molesta sensación de culpabilidad por infidelidad manifiesta… Jose Miguel, no me lo tengas en cuenta.

Por cierto, hablando del gran Bartual, el servicio muy atento.