El restaurante La Bellvitja, se encuentra situado en el barrio del Raval de Barcelona, en la que antiguamente fue la capilla de la Bellvitja, de ahí su nombre, muy cerca de la Rambla, y a escasos metros del famoso Mercado de la Boqueria, en donde dice abastecerse de la mayoría de productos que propone en su carta.

Como eran ya las 12h del mediodia y estábamos justo al lado, nos dijimos que era una buena razón para entrar a conocerlo, además queríamos comer lo mas pronto posible dado que por la noche teníamos una reserva en "Disfrutar" ...

He visto a posteriori que Creixell lo visitó por primera vez en mayo y que hace una descripción bastante detallada del restaurante por lo que no me extenderé demasiado sobre este tema. Añadiré únicamente que a la entrada hay una barra y mesitas altas para poder tapear y desde donde se ve la cocina, que a partir de allí se entra a la sala descrita y que posee también 2 pisos mas que pude ver cuando me dirigí al servicio (muy limpio), ambos bien decorados. En el último hay además otra barra y un piano, supongo que debe ser la coctelería de la que habla nuestra colega.

Este restaurante de cocina catalana es paradojalmente propiedad de la empresa inglesa Brindisa, importadora de productos artesanos catalanes y de otros lugares de la península ibérica, en Londres desde 1988 y que posee en ese país desde el año 2005 cinco restaurantes de tapas (Brindisa Tapas Kitchen).
Al frente de los fogones está Carles Ramon, secundado por Oriol Lagé, uno de los padres del movimiento bistronómico. El responsable de sala es Ángel Alonso.

No nos paramos a mirar la carta, pasamos directamente a pedir el menú, pero por lo que he podido saber posteriormente en ella aparecen ciertos platos de recetas antiguas del LLibre de Sent Soví adaptadas a la cocina catalana tradicional actual y utilizando las ultimas técnicas de vanguardia. Me parece una buena razón para volver a visitar este restaurante y comer a la carta.

El menú elegido a 15 €(a escoger entre 4 entrantes, 4 principales, arroz del día los jueves, con el pan y la bebida incluida y con el postre o café a elegir) consistió en :

Entrantes :

Ensalada del dia Tomate, ensalada y parmesano.Buenos productos, MC la encontró muy rica.

Tartar de bonito con remolacha, berenjena ahumada y olivas Kalamata Muy bueno. Tal vez primaba demasiado el sabor de la remolacha, pero me gustó.

Crema de Brócoli y ajo escalibado con almendras y huevo a baja temperatura Mi hija lo encontró buenísimo.

Principales :

Codorniz frita con ensalada de manzana y mayonesa de soja Curiosa presentación la de una codorniz rebozada, MC la encontró buena, en su buen punto de cocción.

Entraña de ternera con boniato escalibado Mi hija no tuvo suerte, hubo un bemol, nada mas traerle el plato tuvieron que retirárselo, el boniato estaba "congelado". Poco tiempo después llegaron con un nuevo plato. Anaïs nos comentó que la carne era de buena calidad y que el plato en general estaba rico
Esta situación me hizo dudar de la frescura de todos sus productos, que según ellos en su mayoría provienen de la Boqueria o de productores cercanos. Este motivo hará que la valoración relativa a la comida baje.

Pescado del día : Morralla con ensaladilla Sin ser un pescado noble (no se pueden pedir peras al olmo a ese precio) estaba fresquísimo y muy rico.

El pan fue correcto, bebimos agua y cerveza. Excepto mi hija que tomó también el postre del día, Un brownie de chocolate que encontró muy bueno,MC y yo solo tomamos café.

No hubo misterios, la cuenta ascendió a 15 €/persona. Muy buena RCP. Lastima que un producto congelado enturbiara la comida, su leitmotiv es el de producto fresco, artesano y de proximidad... Por esta razón no me atrevo a recomendarlo.
Personalmente me gustaría volver para comer a la carta y ver si realmente su cocina es lo que preconizan.

De nuevo en LA BELLVITJA por enésima vez. Sigue cautivándome y sorprendiéndome !.
Acudí con la agradable compañía de amigas queridas en su primera visita al lugar. Como "cicerone" triunfé!, pues ahora hay cocina continúa hasta las 24:00, desde que abren a las 11:00. , y coctelería arriba.
No hablaré de la comida, pues las chicas íbamos de cháchara, y ya se sabe: " oveja que bala, bocado que pierde"...jeje. Sin embargo, por mi experiencia , puedo decir que siguen con su máxima de excelente materia prima , con presentaciones creativas, junto con atención y servicio diligente y atento.
Empezamos la velada a las 19:30 para una merienda//cena sin complejos. El comedor ya se llenó de turistas extranjeros, con horarios europeos de comidas, y nacionales que, como yo, se apuntan con más frecuencia a cenar temprano, por sentarme muy bien y me facilitarme, luego, unas copitas sin trasnochar .
Pues si, ahora La BELLVITJA , ofrece un rincón delicioso, en el piso de arriba donde tomar una extensa y cuidada carta de copas, cócteles, zumos , combinados con y sin ...etc, en un marco único con restos arquitectónicos de la antigua capilla medieval de Nostra Senyora de La Bellvitja de 1432, y donde hay unos frescos que recrean pinturas de Degas, Rusiñol, Picaso, artísticamente combinadas, para producir el efecto de que "nos acompañan" en el salón. Están realizadas por los estudiantes premiados de la prestigiosa Escola d'Artistes Massana de BCN (adjunto fotos).
En fin, todo un acierto, pues a la buena compañía, se unió el marco , la calidad de barman y sus creaciones . Nosotras tómanos cóctel Energetic Free (adjunto fotos). Todo bajo la mirada de la antigua y auténtica representación, esculpida en piedra, de la Virgen y El Niño., en un ambiente de penumbra cálida .
Salimos a las 23:00 , felices y agradecidas por los momentos vividos en La BELLVITJA, a un precio justo . Gracias!,

No tiene ni un mes de antigüedad y hoy ya ha sido la cuata vez que voy, y siguiendo mi costumbre, ya me decido a compartirlo con vosotros. Se trata de un local situado a 30 mts. del famoso y fabuloso Mercat de la Boqueria de Barcelona, donde deben encontrar qualquier excelente materia prima para sus platos, y se nota!. También el tema decoración, ambiente y servicio, está muy cuidado , sin dejar de ser algo "casual" acorde con el barrio en donde está, y muy dirigido, también, a un público extranjero turista que quiera comer calidad sin formalismos ni etiquetas. Mesas de madera pulida , no hay manteles, pero vajilla cuidada y original. Quizás la cristalería podría mejorar, acorde con el poco interés en promocionar el servicio de vino.
El tema cocina es lo que destaca. Elaboran un menú diario de un 1º y un 2º ( a escoger de dos opciones) sin postre pero con pan bebida ( vino por copas, refrescos, agua, cerveza...etc) y café, por 15€. Es una cocina elaborada de autor con excelente materia prima y mucho saber gastronómico!. Sin embargo, no son esas ridículas raciones que acostumbran algunos restaurantes que, aunque deliciosas, es mas una experiencia que algo que te sacie.
Hoy el menú era: 1º- Revuelto de camarones. o. Sopa de melón y yoghurt ; 2º Sardinas con pimiento asado y tomate, o Timbal meloso de cerdo con verduras y pera; o Flor de calabacín con queso Montenebro y chips de verduras.
Yo tome el revuelto de camarones que me sirvieron muy a mi gusto con el huevo poco techo y los camarones microscópicos pero exquisitos con una original presentación. De segundo el Timbal de cerdo, delicioso y muy equilibrada la textura grasa con las verduras. Como ya las conocía, tome también unas recetas de jamón ibérico que me recuerdan a las de mi madre...
No hay servicio de vino , pues hablamos de una comida informal, sin mantel y sin formalismos. Mesas de madera pulida y no hay cristalería. La carta es corta , y la de vinos también pero podemos encontrar muchas DO. con crianzas interesantes.
Bien, recomendable para comer calidad, mas tranquilos que dentro de La Boqueria , y con mas elaboración a un precio muy adecuado.
Habrá que seguirlos. De momento a mi me va mucho.
Enhorabuena!