Efectivamente es lo mejor de este hotel de 4*: Su ubicación en el centro de Zaragoza. Desde allí todo está a un paso: Zona comercial, turística y el "Tubo".
Edicio histórico inagurado por Alfonso XIII en 1929. Fachada clásica y salones solemnes (para grandes eventos tipo bodas), pero un tanto frios. Hoy en día forma parte de la serie Collection del grupo NH.
Para mi de aires trasnochados, sin dar, ni en las zonas comunes ni en las habitaciones un aire de confort. Es un hotel más que todavía necesita una buena inversión para conseguir una mínima sensación de lujo.
El tema de los ascensores es, por ejemplo, un punto a mejorar (dos y muy pequeños; uno de ellos de forma triangular para dos personas y sin equipaje).
Habitaciones aceptables y con equipamiento suficiente: A/C, minibar, TV, conexión WIFI, caja fuerte y poco más. El cuarto de baño amplio y con detalles standard (aunque se incluye albornoz). Eché de menos un poco más de limpieza en las habitaciones.
Desayuno tipo buffet a 16€ + IVA. Ni de lejos lo vale por la escasa variedad, aunque reconozco que lo que ponen está bien, incluida bollería.
Tienen un buen restaurante de hotel (La Ontina, que no visité durante mi estancia, aunque lo conozco de otros años).
El precio que indico es precio empresa y sin desayuno e IVA. En cualquier caso, existen muchas ofertas que pueden ser interesantes.