Hotel de 4 estrellas situado en un polígono industrial a las afueras de Montilla. Regulares indicaciones para llegar, es fácil perderse y dar unas vueltas por un polígono casi fantasma hasta llegar. Hotel nuevo, inaugurado en enero de 2009. Alojados en régimen de alojamiento y desayuno.
Primera impresión favorable. Amplia entrada, decoración moderna, todo muy nuevo y cuidado. Parking descubierto y cubierto gratuito en ambos casos. Piscina, padel, creo que spa (aún no en funcionamiento). Habitación amplia, limpia, suficientes armarios, cama Queen Size, minibar y TV plana grandecita. Cuarto de baño amplio. "Zona" de trabajo en la habitación. El hotel tiene WIFI gratuito (creo). Hasta ahí, todo correcto en un hotel de 4 estrellas. Ahora viene lo defraudante. El minibar estaba vacío, salvo dos botellines de agua cortesía del hotel, y vacío se mantuvo todo el fin de semana (tampoco se repuso el agua de cortesía). En el baño no había "amenities". Si se te olvida el peine en casa, necesitas unos pañuelos de papel... vas listo. En otros muchos hoteles de similar categoría te ponen kit dental, de afeitado, esponjillas para zapatos... A ver, que luego, muchas veces no se usasn esas cosas... pero están a disposición. EL jabón de manos (huele de maravilla a miel y hojaldre) y de el gel de ducha en jaboneras de pared. Creo que un 4 estrellas debe cuidar más esos detalles... A lo mejor la crisis hace que estén reduciendo gastos pero, EMHO, que bajen la categoría. La ducha no tiene puerta, queda muy moderno y bonito, pero no es nada funcional porque organizas las Tablas de Daimiel en el suelo del baño. Cama confortable y almohadas correctas.
EL desayuno tipo buffet, escaso. Muy escaso. Unos croissants, galletas, pan con aceite (lo mejor), algo de fiambre, fruta fresca (muy buena). Lentos en la reposición y poca variedad. Volvemos a lo mismo... eso no es un desayuno de hotel de 4 estrellas.
En general bien pero... No se si es que aún no están a pleno rendimiento pero, nosotros, en principio no repetiríamos hotel. Hay poca clientela y eso hace que ahorren en variedad de desayuno, amenities, minibar, etc. Pero esa escasez hará que los clientes sigan faltando y no repitiendo. La pescadilla que se muerde la cola. Eso sí... el precio es de 4 estrellas.
Un buen hotel, sin duda. Buenas instalaciones. Perfecto para convenciones y viajes de trabajo. No tan bueno para viajes de placer. Pero con menos detalles que el salpicadero de un 600 en las habitaciones.