Hotel del que ya han descrito su ubicación. Zonas comunes muy amplias y una recepción con personal muy amable.
Fácil de localizar y acceder (lo cual no es poco en numerosas ocasiones), con un parking privado, con detalles también poco frecuentes: fácil acceso, sin necesidad de maniobras ni de ajustar, con una señalización perfecta, para sus apartados, todoterrenos o monovolúmenes, coches de tamaño normal, pequeños o eléctricos donde facilitan su recarga: eso sí, el costo es de 15 euros día.
Habitaciones (la que yo estuve orientada a la playa de San Lorenzo) y no quiero decir que se podía ver la misma, es que estabamos casi encima de forma metafórica. La habitación de tamaño algo justito, bien insonorizada, cómo detalle que no me gustado fue que la ducha era de las primitivas, en cuanto a termostato y mezclador.
No hice uso del desayuno, pues yo que suelo tomar un café y un croissant, no estoy dispuesto a pagar a más de 14 euros (ahora que he leído el comentario de nuestro compañero, me alegro de mi decisión).

Si hice uso de una cena, en el restaurante donde cene por 19 euros, con un menú muy bien resulto y mejor servido. Una pregunta ¿una cena con dos platos, postre y vino, a 19 y una desayuno a 14?.

El precio por habitación, sin desayuno con una supletoria para una niña, a 90 euros.
En conjunto, muy bien situado, con vista fenomenales, personal muy agradable, pero con algún detalles a revisar, que tal como está el mercado, fuera de temporada, puede retraer a clientes.

Hotel muy bien situado apenas a 50m de la Playa de San Lorenzo y a 2.5km del casco histórico de Gijón.

Muy moderno y confortable. Servicio joven con sonrisa y ganas de agradar. Atentos.

Habitaciones todas ellas dobles tipo standard (con doble cama o de matrimonio) no especialmente amplias (20m2) pero muy luminosas y con correcta insonorización. La mitad con vistas a la playa; la otra a la piscina y al Parque de Isabel la Católica. Equipamiento standard, tanto en el dormitorio (AC, caja fuerte gratuita, TV, planchadora y una mesita con un silloncito), como en el baño (suficientes detalles de aseo). Decoración moderna y funcional. Wifi en las habitaciones pero de pago (gratis en las zonas comunes).

Desayuno buffet, como suele ser habitual en este tipo de cadenas, no muy generoso para los 14€ que cobran (ni en variedad ni en calidad).

El restaurante (Amalur) con carta amplia pero que no llegué a conocer (mucha y muy buena restauración en Gijón).

Otros servicios como sauna, jacuzzi, fitness-center, terraza-solarium o la piscina exterior pueden hacer la estancia más agradable.

El precio que indico es de empresa.

Fue el hotel que seleccionamos para mi noche de bodas... que después de tanto Juan Gil 12 meses resultó ser un visto y no visto.

En fin.

Bonita habitación con vistas a la playa de San Lorenzo. Amplia, muy bien equipada; incluso con plancha.

Lo más interesante del hotel es su Spa, donde se puede encontrar un jacuzzi, una sauna seca, una sauna húmeda y alguna cosa más.

El desayuno es muy recomendable y completo.