Impresionante hotelito de 7 habitaciones. Televisión y CD Bang&Olufsen, ordenador portátil en la habitación con conexión a internet.
No és exactamente un hotel rural, pero podría tambien considerarse por su decoración entre rústica y de vanguardia.
Servicio muy amable y ahunque parece inexistente, no te falta de nada.
Muy bonito anexo hubicado en el antiguo teatro del pueblo (de ahí el nombre)donde sirven unos deliciosos desayunos y una carta correcta. Carta de vinos algo corta, pero se eniende dado su reducido nº de habitaciones. Pequeño jardín con piscina un tanto rústica.
Un detalle que me llamó la atención: justo a los pies de la bañera, hay un rectángulo en el suelo con calefacción radiante, entonces sales de la ducha y notas el suelo caliente. Genial!!!
Super, super recomendable y el precio no es desorbitado por todo lo que ofecen.
Enorabuena!