Remírez de Ganuza & Benjamín Romeo

Este fin de semana aproveché la generosa invitación de Fernando Remírez para visitar su Bodega en Samaniego. Como con las carreteras hasta Rioja están como están aprovechamos el viaje para visitar el domingo a Benjamín Romeo. De todo ello rendiré debida cuenta pero a petición del respetable os adelanto algunas pinceladas.

Fernando personalmente me enseñó la Bodega, está enclavada en el corazón de Samaniego junto a la iglesia pero perfectamente integrada con el pueblo. La Bodega esta muy bien organizada, abundante personal, excelente tecnología y mimo del producto hasta niveles increíbles. La mesa de selección es un prodigio, los diferentes depósitos muestran la evolución de las tecnologías de vinificación (o podríamos incluso decir) que las anticipan, lo último es no sólo los depósitos troncocónicos invertidos sino también la “lavadora” una máquina programable que estaban probando y que adecuadamente programada efectuaba ella sólo diferentes partes del proceso de vinificación. También su sistema de “bolsas” para la extracción del mosto y el tratamiento separado de hombros y puntas muestran la preocupación por estar a la última.

Ya os contaré con detalla pero catar catamos de todo, desde un excepcional Remírez de Ganuza del 94 hasta pruebas de barrica del 2001 o los mostos (casi vinos ya) en proceso de elaboración de esta misma vendimia.

Tuvimos también un hueco para pisar el viñedo, terminada la vendimia del temopranillo, en marcha la de garnacha y graciano y a punto de comenzar algunas zonas con cabernet disfrutamos de la combinación de rojo burdeos, verdes y amarillos que muestran los viñedos a esta altura del año.

El domingo tuvimos un rato para acercarnos a ver a Benjamín Romeo a San Vicente de la Sonsierra, de nuevo el pueblo es una preciosidad. La bodega de Benjamín resulta chocante después de ver el montaje de Remírez de Ganuza. Apenas un garaje, pero un graraje donde se elabora uno de los vinos de más éxito. Tras presentarnos el proyecto Benjamín nos mostró la bodega y las famosas “cuevas” que dan nombre a sus vino en la fortaleza del pueblo. En la Cueva del Contador envejecen sus vinos en un ambiente muy estable de temperatura (13º) y humedad (65%). También hicimos una extensa cata en la que faltó su Contador 2000 (agotadísimo hasta en la Bodega).

Y bueno ya os contaré algo más.... incluso pondré alguna de mis “absurdas” fichas de cata (Atención sólo aptas para amantes de la poesía) y os daré algo la paliza con datos técnicos.

Ah, no puede dejar de citar el poderío gastronómico de la zona, tanto en Samaniego como en San Vicente disfrutamos de cocina de muy alto nivel...y como no.... con los vinos de Fernando y de Benjamín.

Salut