Yo creo que sí que se nota. Lo que pasa es que se deben mantener fieles a un

Yo creo que sí que se nota. Lo que pasa es que se deben mantener fieles a un estilo de vinos que es el que espera el consumidor y los cambios se hacen paulatinamente, poco a poco cada añada. Además en el caso de los vinos de crianza que salen al mercado unos años más tarde la mano del nuevo enólogo puede tardar 3-4 en poder verse.

Como bien dices cada maestrillo tiene su librillo y generalmente el relevo lo toma alguien que se ha formado en la casa, con lo que tiene interiorizado el estilo y los métodos de trabajo, esto unido a que se debe ofrecer al consumidor el estilo de vinos que espera de cada bodega hacen que cambios no sean radicales.

En el caso de El Coto de Rioja asumió la dirección técnica Pedro Aibar procedente de Viñas del Vero Somontano, si mal no recuerdo, y creo que al blanco que ha dado un estilo totalmente diferente, más comercial, más expresivo. En el resto de vinos de la bodega no te puedo decir porque no los suelo beber con asiduidad, pero me imagino que también se habrá notado cambio. Pero en este caso el relevo lo ha tomado una persona que no había estado vinculada a la bodega y me imagino que buscando ese cambio de estilo.

Un saludo.