La verdad es que en un fin de semana disfrutar de una calçotada, una erizada, y una comida en el mejor restaurante del mundo, con buenos amigos y mejores vinos, no tiene precio.
La verdad es que en un fin de semana disfrutar de una calçotada, una erizada, y una comida en el mejor restaurante del mundo, con buenos amigos y mejores vinos, no tiene precio.
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.