Para nada, Gasti. Se notaba la frescura de la fruta pese a ese almíbar, porque incluso te venía una reminiscencia verde de la piel. Y luego además te ayudaba el helado.
Para nada, Gasti. Se notaba la frescura de la fruta pese a ese almíbar, porque incluso te venía una reminiscencia verde de la piel. Y luego además te ayudaba el helado.
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