Se me ponen los dientes largos unicamente de ver la foto de esa fideuá... y encima después explicas lo buena que estaba... y con detalle. Y yo aquí, atormentado imaginando esos fideos "impregnados del sabor del fondo del marisco"... que no tendré oportunidad de degustar hasta que atraviese nuevamente los Pirineos.
Me alegro que disfrutases,
Abrazote
Joan