Ayyyyy qué moriña!!!
En El Portillo de Busto hay que parar obligatoriamente, andar 20 metros, subir a la cresta y divisar las dos vertientes: parecen dos países distintos. A un lado un mar amarillo de cereales sin un puñetero promontorio, y al otro una sierra verde preciosa con deliciosas irregularidades. El Alto el Cueto a tu derecha, el Castillo de la Aldea a la izquierda y Peña Bonete de frente.
Voyyyyyyyy