Hola compañero, ya ves que no eres el único que haces locuras gastronómicas...aquí tienes dos buenos compinches de fechorías ;-))
La verdad que no nos imaginábamos que el menú fuera a ser tan largo, salían platos uno tras otro a cada cual más sabroso, así que te puedes imaginar que festín. Yo creo que Ignacio, al venir nosotros con pretensiones de probar un poco de todo se vino arriba y movió los fogones con entusiasmo. Se lo agradecimos.
Estoy de acuerdo en lo de la vida del copiloto, es durísima...cayó como un peluche :-))))
En cuanto a lo de juntarnos, después de ésta locurilla, nos apuntamos a un bombardeo.
Un saludo.