Acabamos de llegar del Priorat, de alojarnos en el Mas Ardèvol y nos hemos venido encantados. Los propietarios hacen que la estancia sea especial y lo es tanto por el entorno, como por el Mas en si, por la comida como por la filosofía que rodea todo ello. Nosotros escogimos el pack denominado "itinerari de tast" y ha sido toda una experiencia. Comprende una bodega del priorat (Celler Burgos Porta) otra de Montsant (Ficària Vins) i un molí de oli (Miró Cubells)
El trato en todas ellas y en la casa es muy personal y convierte el viaje en algo especial.
Teníamos incluido dos cenas y desayunos. El primer día Gemma, la dueña , nos hizo una sopa de boletus y un solomillo con alcachofitas. De postre nos sirvió granadas con "vi ranci". La segunda noche tuvimos crema de calabaza y "gall de corral" al horno.
Los desayunos son espectaculares (tortilla recién hecha, embutido y queso catalán, dulce recien horneado, etc)
Totalmente recomendable, nosotros volveremos porque es una comarca de turismo muy poco masificado y nos hemos quedado con ganas de hacer muchas mas cosas para las que no hemos tenido suficiente tiempo.

If you are for a peaceful place , where you can eat the most delicious food and feel delighted by an amazing landscape,then go for it. Mas Ardevol is where you can find it all. Absolutely inspiring!
The owners Gemma and Germinal are kind and very professional.
My husband and I had a dream holiday there and strongly recommend Mas Ardevol as the perfect break .
Thanks a lot!

...Gema y Germinal lo mejor de la casa, imaginaos que siempre que recuerde priorat me vendran a la cabeza como quien recuerda el paisaje...son maravillosos...

Es una casa en un lugar perfecto para sentirte en el paraiso vitivinicola, tienen de todo, pero mencion a parte el DESAYUNO, es algo mas que un desayuno, pan exquisito, fruta, zumo, aceite de oliva sublime, tortilla recien hecha para cada pareja, cafe y leche "of corse"...bolleria casera y calentita ( a mi me toco un queque recien hecho, y un strudell calentito al dia siguiente)... un señor desayuno...

No hablemos del baño, la presion del agua, las sabanas ( aun recuerdo el olor), la cama mas que comoda, la decoracion de las habitaciones sorprende por el exquisito gusto...

En fin, ir al Priorat y no volver a quedarme en casa de Gema y Germinal seria una autentica estupidez por mi parte.

......conversar con ellos de vino es tambien un magnifico atractivo, y no olvideis preguntarle por las cremas que elaboran, a la parienta la tengo aun levitando con sus cremas de avellanas...

No falteis por dios, son geniales.

Magnífico como siempre, lugar de referencia para los visitantes del Priorat. Llevada con maestría por sus propietarios Gemma y Germinal que saben hacer que el cliente esté a gusto en todo momento. Esta es nuestra 4 ó 5 visita, no recuerdo bien pero nosotros no entendemos el Priorat sin la conversación de Gemma y Germinal, sin sus magníficos desayunos, sin esas camas comodísimas, sin esas sábanas y toallas con olor a flores y sin sus magníficas vistas sobre las montañas de licorella del Priorat…..Esta vez nos tocó una de las habitaciones especiales, amplias cómodas con estupenda climatización, fantástica cama, cuenta con sofá, televisión, nevera y una terraza exterior en la que sentarte para contemplar las maravillosas vistas que se disfrutan desde allí. El desayuno en esta ocasión contaba con una deliciosa y única tortilla recién hecha con huevos de corral y espárragos silvestres. Esta casa está llena de momentos y sensaciones especiales para nosotros. Por si fuera poco encima geles y cremas hechas con productos naturales de la zona –uvas y avellanas-, vale la pena probarlas.

Hacía tiempo que quería descubrir el Priorat más auténtico. Vimos Mas Ardevol en una guía de alojamientos rurales de calidad y nos decidimos a reservar. Hemos pasado dos noches, con los dos niños, y los cuatro lo hemos pasado en grande. El entorno es mágico y hace que te olvides de todo, un antiestrés automático. La atención de la propietaria, Gemma, es un encanto y te hace sentir como en casa (bueno mejor, porque cocina cucho mejor que yo en casa). A los 4 nos encanta comer, así que los desayunos caseros y las cenas "gastronómicas" han sido un festival para toda la familia. Os lo recomiendo sinceramente, no dejéis de ir. ¡Nosotros ya estamos pensando cuándo es el próximo puente para volver!

En nuestra quinta visita al priorat, cambiamos de casa rural, siempre habiamos estado en "el moli del pont", muy recomendable, pero quisimos darnos un lujo y reservamos en Mas Ardevol, en una de las tres suites 130 euros + iva (lo de + iva nos enteramos a la hora de pagar).
En principio todo perfecto el sitio, la habitación, la fira del vi de falset por medio, vamos no estaba de cara, pero ..., cual es nuestra sorpresa que nos comunican que no nos van a poder servir cenas porque tienen que exponer en la fira y "vamos muy liados", no normal seria avisar, tenemos un nano de dos añitos y la verdad no nos hacia gracia tener que cojer el coche para ir a cenar con el nano, nos explican que no hay problema, que los moxos no aparecen por la carretera, a mi no me importa la policia si no sufrir un accidente, pero bueno pase nos buscamos la vida, pero sigo, somos tres y la perra, pues nada dos toallas y jabon para dos, en tres dias no nos cambian las toallas, simplemente nos hacen la cama, no arreglan la habitación, en segundo dia nos encontramos la puerta de la habitación abierta de par en par, en fin un desastre para una habitación que al dia nos cuesta 130€ `+ iva y para terminar a la hora de pagar si no revisamos la cuenta nos cobran 56€ de más, lo mejor de la casa la pagina web y el lugar magico donde esta enclavada.
El servicio y la atención un cero patatero, menos mal que las gentes de porrera y en general de toda la comarca es maravillosa, como os cuenta es nuestra quinta vez y esperamos volver a repetir, pero será en "el moli del pont".

He estado alojado en un par de ocasiones hace unos años y doy fé de que es un lugar precioso para pasar unos dias de relajación en el corazón del Priorat, está al lado de Porrera. El acceso en coche es un poco dificil pero una vez allí la casa cuenta con una decoración puesta con gusto y muchos pequeños detalles.

Una cosa que me encantó, y en la que coincido con el anterior comentario, es en la calidad del desayuno servido. Magnificas tortillas, embutido, pan, buen aceite, etc. Te hacen sentir como en casa. Muy recomendable.

Magnífico lugar que es perfecto para tenerlo como base para visitar el Priorat.
Todo está pensado para el disfrute del cliente, empezando por una cuidada decoración que da paz al espíritu con alegría, bonitos y alegres colores, buenos colchones, ropa de cama con olor a flores, habitaciones con cada detalle pensado al milímetro..
Otro cantar es la cocina de Gemma, estupenda cocinera con magnífica materia prima y un deseo por agradar a sus comensales desde que se levanta por la mañana y empieza a preparar esos fantásticos desayunos, tortillas con huevos de la casa y espárragos del campo, embutido escogido de la zona, pan recién hecho...fantástico, las cenas no se quedan atrás y todo ello acompañado de los magníficos vinos del Priorat para todos los gustos y bolsillos.
Muy importante en esta casa es el trato, siempre enfocado al disfrute de los huéspedes y con un deseo de hacerte sentir en casa que logran sin lugar a dudas.
Si se quiere visitar bodegas también se puede contactar con los propietarios y ellos pueden organizarlas. Gracias a sus propietarios -Gemma y Germinal- se puede obtener mucha información de la zona y sentirse como en casa.