De color rubí rojizo de capa media, claro, limpio, abierto. Reflejos cobrizos y dorados, brillante, sin asomo de precipitados. Ribete amplio, anaranjado.
En nariz está lleno de detalles, muy completo, serio, conjugando con polivalencia todo lo que tiene. Lo primero en salir es una elegantísima punta de café recién molido seguida de maderas exóticas, cedro, clavos, atillos de canela y piel de naranja (por este orden) seguido de un perfume a cueros viejos y pétalos ajados. Se resiste a caer en mayor reducción, nada de humedales, fúngicos o paisajes otoñales. Emerge con fuerza los frutos rojos, el zumo de granada, los madroños en licor, la infusión fría de hibiscus con ese punto silvestre a zarzal. Limpio, fresco.
En boca es terso, de textura bruñida y unos taninos que resplandecen. No se bebe, fluye con enorme frescura por la boca y desaparece sin que nos demos cuenta. Fresco, frío, acídulo, con un tintineo de fruta roja sabrosísima que centellea a galope de una acidez del carajo!!! Este Imperial se restiste a ser catalogado, a medio camino entre sus dos hermanos del 64 y 68 aunque con algo menos del musculazo del que hacían gala ambas cosechas. Estos vinos de Cvne nunca dejan de sorprender.
Más información del vino: http://vinosclasicos.blogspot.com.es/2014/10/imperial-1966-gran-reserva.html