Desde La Pitanza queremos primero reiterarle las disculpas que ya le hemos pedido durante su visita.
Hemos asumido nuestra culpa, pedido disculpas, no hemos cobrado el plato que no ha salido de su agrado e invitado a 2 copas de cava.
Con franqueza le diré que me encantaría que como cliente me tratasen de este modo en los lugares a los que acudo y no hablo de hostelería; me refiero al taller del coche donde se equivocan en el diagnóstico, al médico con la misma razón, al abogado cuando se le "pasa" un plazo, a mi compañía de teléfonos cuando me deja sin servicio o cobertura, o hidroeléctrica, o el banco, por no hablar de las compañías de seguros entre otras... Lamentablemente ni por supuesto me devuelven mi dinero ni la mayoría tan siquiera se disculpan por ello. Ojalá consigamos que en todos los ámbitos de la vida haya la excelencia que a veces solicitamos en los restaurantes que visitamos.
No quiero en ningún momento dar la impresión que no lamentamos que la temperatura de un plato no sea la adecuada o el tiempo de espera haya sido excesivo. Quiero dejar claro que como restaurante y en busca de la excelencia hacemos lo que está en nuestra mano para que el cliente no sienta que "nos da igual" o no a asumimos nuestros errores. El entrecotte tiene un precio en carta de 19€ de los que no hemos cobrado ninguno. Creímos paliar en cierta manera el daño causado
También me gustaría puntualizar que según reza su crítica "observará las opiniones futuras" antes de decidirse a volver. Confío como hostelero, pero ante todo como veremero que los próximos foreros expresen sus opiniones tanto cuando sean positivas como cuando sean negativas pues si no he entendido mal, usted ha visitado nuestra casa 4 o 5 veces antes pero sólo ha decidido comentar la que no ha estado a la altura de lo esperado.
No malinterprete mi comentario, es usted libre (faltaría más) de calificar y comentar lo que vea conveniente pero si todos hiciésemos esto, a la hora de salir de casa leeríamos otro foro pues éste no reflejaría la verdad de la situación.
Reiterarle de nuevo las disculpas por lo sucedido, lamentamos no haber sido capaces de enmendar nuestro error pese a nuestro esfuerzo por conseguirlo. En un servicio complicadísimo por razones de gestión que no vienen al caso y con un estrés fuera de lo normal hemos buscado la pausa necesaria y el interés en dejarle un sabor al menos agridulce, lamentablemente no hemos pasado del amargo.
Un saludo y mil disculpas de nuevo. Estaremos encantados de recibirles de nuevo cuando ustedes así lo decidan.
Hugo Mira