Tras los comentarios de menú de la anterior visita, probamos a ir a menú puro y duro (o casi).
Había menos gente, media entrada que dirían los futboleros (como su dueño), con lo que el problema de la sonoridad se menguó notablemente. Buen aire acondicionado.
Cuatro para comer de menú: dos de arroz con col y costillas (y algun trozo de longaniza) y dos de ensaladas de verano bastante variadas y completas. De segundos dos optaron por el arroz y los otros dos optamos por el guisado de cordero bien de sabor, no mucho cordero (esperable) pero suficiente. El arroz estaba aceptable, falto de fondo de sabor, con buena cantidad de col y carne.
No tomamos pan aunque se nos ofreció en dos ocasiones (estaba incluido). Por cortesía de la casa unos trozos de apio con crema de queso, curioso; el apio estaba para buenas muelas.
Para beber tomamos dos Radler y agua. Tres cafés.
No pudimos resistirnos y añadimos un Nebla (15€) y dos copas de Bahía de Denia dulce (por cortesía de la casa).
Servicio muy rápido, muy amable y voluntarioso. Pongamos 1€ el café, 3€ el arroz, 3€ el cordero guisado, queda 0.5€ para el pan y el aperitivo de cortesía, 1€ la bebida, y 1€ de IVA.
Yo no sé donde ganan dinero.