De acuerdo con lo expresado por mi anterior compañero,el inigualable y versátil Pablo Iñigo. Excelentes puntos de fritura y cocción de unos productos de primera calidad. Los segundos son platos de factura y ejecución clásica y acertada, sustanciosos, pantagruélicos, ricos , bien hechos. La terraza es estupenda y tremendamente agradable.El servicio dirigido por Cristina excepcional. La carta de vinos debería mejorar, pero el mercado marca la pauta. En mi opinión, una de las mejores ofertas gastronómicas de Sitges, quizás la mejor en conjunto.

La verdad, que tras estar en este restaurante durante años. no se nos había ocurrido meterlo aquí, pero merece la pena mucho más que cualquier restaurante del Port d Aiguadolç. Mejor comida, brisita agradable y terraza con vistas al Mar y a la Playa, se puede pedir más?. Pues si, hay más, la atención. Profesionales de la hosteleria, superamables y atentos, Cristina la Jefe de Mesas una perla digna de un estrella Michelín.
Entrantes buenísimos (croquetas, chipirones, jamón, etc) todo rico y los arroces...pues mejor que en el resto de sitios de Sitges con diferencia y hemos recorrido casi todos. Carnes, pescados, de buena calidad y entrando en el apartado de cocina muy muy trabajada.
Si quieres sentarte de tapeo de raciones también puedes. Carta de vino adecuada, algo corta