Marrón terroso, con ribete anaranjado, limpio y brillante. Capa media. Lágrima desordenada, escasa y lenta.
Impetuosa nariz desde un principio, franca y al mismo tiempo complicada de desenmarañar debido a su complejo abanico; ciruelas, moras, ¿tomate?, tostados, ahumados, toffee, cueros, mucha humedad y vainilla.
En boca muestra rusticidad, una brutal acidez, un alcohol presente, una madera bien trabajada y unos taninos de momento duros, y observamos tonos punzantes, pimienta, balsámicos, menta, barrica vieja, nueces y chocolate muy amargo.
Final largo, tánico, frutal, ahumado y mineral.
Un vino con mayúsculas, con una inmensa amalgama. Una elaboración a medio camino entre el clasicismo y la modernidad. Un grande de verdad. Su precio, unos 90€, no defrauda para el nivel que ofrece.
Me dejó alucinado, aunque no lo vi tan clásico como pensaba. Por cierto, ¿Qué añada te parece mejor, mejor 97 ó 98?. Pude elegir entre las dos y al final me decanté por esta. De todas formas, es un vinazo y lo malo como de costumbre el precio.
Un abrazo
Es bastante clásico de estilo y elaboración, quizá no hiperclásico estilo Borgogno o Mascarello pero sí muy clasicón, lo más importante de este vino es su viñedo de origen, la Cascina Francia es el viñedo más ato de Serralunga y eso le otorga un aura muy especial. De una selección de las mejores uvas sale el mítico Monfortino, solo en las mejores añadas.
A mí me gusta más 98 que 97 en líneas generales, aunque en este vino en concreto es mejor 97, si pillas un Monfortino es una añada histórica, pero ya hablamos de más de 300 pavos…
Saludos,
Eugenio.
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