Tras 20 meses al leer mi anterior nota de cata veo que vuelvo a coincidir

Tras 20 meses al leer mi anterior nota de cata veo que vuelvo a coincidir bastante en esta nueva botella. Nariz un poco rustica y con poco detalle, con demasiada presencia de las notas de roble americano. En boca aparece una fruta muy potente pero con mucho tablón, una madera que después de 6 años de su elaboración, no creo que llegue a integrar bien ya. Es una lástima que esta buena materia prima haya sido tan castigada por el roble nuevo. No seduce.
A las 36 horas de abierto en boca ha mejorado, se le ha ido la evidencia de la madera nueva, siendo más carnoso y frutal. Sin embargo, en aromas no ha variado, sigue sin ofrecer ningun tipo de matices. Un vino frutal, potente, algo rústico, al que se ha maquillado con demasiada madera para mi gusto.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar