Gran día en perspectiva, pues el sábado 16 de febrero teníamos reservada una mesa a las 13h30 en uno de nuestros restaurantes preferidos, Els Casals, el dominio del gran chef Oriol Rovira y además teníamos cita con nuestros amigos de Verema, Ferran (Owiban Ferran) , Jaume (Socdesitges) y su mujer Conxita.
LLegamos un poco antes, para instalarnos en la habitación del hotel, pues, como hacemos en casi cada ocasión, íbamos a pernoctar allí para disfrutar del magnifico paisaje y de la calma y del silencio que lo circunda y al mismo tiempo disfrutar al día siguiente de un excelente y copioso "esmorzar de pagès" (desayuno payés). Podreis ver algunas fotos en el primer comentario.
No voy a hablar nuevamente de la descripción del restaurante, ni de su filosofía, recordaré únicamente que éste ostenta una estrella Michelin y dos soles Repsol ... Los que no me habéis leído antes y queráis conocer mas a fondo mi opinión sobre Els Casals y el Chef Oriol Rovira, podéis hacerlo leyendo mis 6 comentarios anteriores en Verema.
Tanto el servicio de sala como el servicio del vino bajo la batuta de la directora de sala-sumiller Carolina Calvo fueron excelentes, aunque esta vez por ciertos altibajos en el servicio del vino, del camarero que se encargó de nuestra mesa, no lo reflejaré así en mi puntuación, que solo será muy buena. Como siempre buena vajilla y cubertería y buenas copas Riedel.
Nos situaron en una mesa ubicada en la parte izquierda del comedor. La distribución y la decoración de la sala hace que uno se sienta bien aislado del resto de los otros comensales . La sala del comedor gastronómico se llenó.
Cuatro comensales tomamos el menu gastronómico de la trufa negra Tuber melanosporum y otro comensal, Conxita, comió a la carta (acordado precedentemente con el Chef, pues en principio el menú se aplica a toda la mesa).
Voy pues a detallar primeramente el menu gastronómico y al final lo haré con la carta.
El menú consistió en 3 aperitivos, 7 platos salados y dos postres (120 €)
(Las 6 primeras fotos de los platos por imponderables técnicos de Verema aparecen con enlace directo, el resto de ellas aparecerán, sin enlace directo, haciendo referencia al texto en negrilla, en el primer comentario.)
Aperitivos :
Torrada amb tòfona Tostada con trufa tuber melanosporum. Un clásico en su menú de la trufa, pero que clásico, una maravilla... a veces presentado con sal gruesa y otras sin, como en esta ocasión. Es un placer digno de los dioses del Olimpo. Podría comerme varias tostadas sin problema.
Terrina de cérvol amb castanya i tòfona Terrina de ciervo con castaña y trufa tuber melanosporum. Una terrina para dos personas, acompañada de un excelente pan crujiente. Pienso que una terrina mas pequeña para un comensal hubiese sido mas fácil de degustar, pero bueno lo mas importante es que el contenido de la terrina era de matricula de honor.
Sobrassada amb mel i pa amb tomàquet Sobrasada con miel y pan con tomate. El aperitivo clásico por excelencia del Chef. Para compartir. En está ocasión presentado sin panal de miel, únicamente había un ligero toque sobre la sobrasada, pero que casi no se percibía. Esta sobrasada, de producción propia, de cerdo duroc , que actualmente se encuentra en la carta de muchos grandes restaurantes, se sirve caliente, para extender sobre el pan con tomate... Pura gozada . Excelente.
Platos :
Amanida de col a la brasa amb encurtits i tòfona Ensalada de col a la brasa con encurtidos y trufa tuber melanosporum. Un entrante muy bien elaborado, lleno de frescura y muy sápido. Muy bueno
Pésol llagrima amb gamba i tòfona Guisante lágrima con gamba y trufa tuber melanosporum. Gamba casi cruda, fresquísima. Que estallido de sabores, que explosión gustativa de la trufa con los guisantes... Un platazo, señoras y señores
Ou ferrat amb cremós de patata trufada i tòfona Huevo frito con patata cremosa trufada y trufa tuber melanosporum. Hummmm... y todo ello con un pan de los mejores que he probado últimamente, elaborado por el Chef, para destrozar el huevo y llevárselo a la boca impregnado de trufa, acompañado por un excelente cremoso de patata trufada. Otro plato para recordar.
Carxofa farcida de botifarra del perol i tòfona . Alcachofa rellena de butifarra del perol y trufa melanosporum. Un plato gargantuesco, riquísimo, otra explosión de sabores y texturas.
Arròs de tòfona. Arroz de trufa melanosporum. Sapidez, potencia, y finura ... De cada año es mejor. Un plato superlativo.
Caneló amb tòfona. Canelón con trufa melanosporum. Muy bien elaborado a base de carne de pollo y de cerdo. Diferente y Excelente.
Llebre guisada al vi amb cremòs de patata, fetge gras d'ànec i tòfona. Liebre guisada al vino con patata cremosa, foie-gras de pato y trufa melanosporum. Plato potente perfectamente cocinado. Un guiso excelente que puso el broche de oro a la parte salada
Como ya he mencionado anteriormente en el comentario de unos de los platos, el pan que acompañó la parte salada de la comida, elaborado por el Chef , es extraordinario.
De postres tomamos :
Gelat de vainilla amb tòfona. Helado de vainilla con trufa melanosporum. Este postre lo tomamos hace dos años. Inolvidable. Helado de vainilla riquísimo y sabor de la trufa muy persistente y durable en boca. Un super-postre.
Flam amb tòfona . Flan con trufa melanosporum. Los flanes del Oriol son extraordinarios, jamás he comido flanes de esta categoría. El sabor de la trufa se casa perfectamente. Un "must."
Paso a continuación a relatar lo tomado por Conxita a la carta :
Aperitivo :
Pernil amb crostra. Jamón con corteza de cerdo.
Entrante :
Sobrassada amb mel i pa amb tomàquet. Sobrasada con miel y pan con tomate. (No hay foto, el plato es casi idéntico al aperitivo del menu, pero en mayor cantidad)
Plato principal :
Pastís de patata amb porro confitat, sípies petites i cansalada. Pastel de patata con puerros confit, pequeñas sepias i panceta.
Postre :
Guifré : pastís de xocolata clàssic, salsa de cacau, fruita de la passió i gelat de vainilla. Pastel de chocolate clásico, salsa de cacao, fruta de la pasión y helado de vainilla.
Por lo que nos comentó, todo le gustó, si quiere ampliar el contenido podrá hacerlo en los comentarios de la crónica.
Para beber tomamos varias botellas de agua filtrada gratuita y en cuanto a los vinos le dejamos la difícil tarea de escogerlos a Ferran, quien lo hizo con mucha propiedad.
Tomamos los siguientes vinos :
Una botella de champagne De Sousa Tradition Brut Blanc AOC Champagne. De Sousa (Avize), cepages 50%,Chardonnay, 40% Pinot noir 10% Meunier .Viticultura biológica y biodinámica. Embotellado el 04/05/2016 y degollado el 15/11/2017. Burbujas finas, elegante, redondo en boca, fresco y equilibrado. Me gustó mas el que tomamos el año pasado De Sousa Grand Cru Reserve Brut Blanc de Blancs AOC Champagne. A este le encontré algo mas de acidez.
Una botella vino tinto crianza de Ferrer Bobet Vinyes velles 2014 DOQ Priorat. Celler Ferrer Bobet. Cepajes Viñas viejas de Carinyena 70%, 30% Garnatxa negra. Fermenta en depositos de 15 y 30 Hl de madera, inoxidable y cemento. Transformación maloláctica y crianza realizadas en botas de roble francés de grano fino y tostado ligero y medio durante 18 meses. Es embotellado sin clarificar ni filtrar con una crianza minima en botella de 11 meses. Vino frutal, de cuerpo medio, muy equilibrado, mineral y muy fresco. Me gustó
Una botella de Bourgogne blanco crianza Chablis Premier Cru Mont de Milieu 2015 AOC Chablis 1er cru. Corinne et Jean Pierre Grossot (Fleys). Cultura biologica y vendimia manual. Crianza en barricas de roble durante 6 meses sobre sus lias despues de la cosecha y el vino obtenido continua su crianza hasta el embotellado con un recorrido total desde la cosecha de 17 meses. Viñas 100% Chardonnay. Color amarillo pálido, fresco, bien equilibrado y largo en boca, me gustó aunque me esperaba mas, le encontré poco cuerpo .
Para acompañar los postres tomamos una copa de vi bullit ...
Finalizamos con 4 buenos cafés y un cortado acompañados de unos carquinyolis y unas trufas de chocolate.
La cuenta ascendió por la parte correspondiente al menú a 150,70 €/persona. Excelente RCP para un festín de estas características. Comimos de maravilla, una de esas comidas que no se olvidan nunca, tanto a nivel gastronómico como de la compañía. Fue un verdadero festival que duró 4h30, con una cocina que brilló a un gran nivel en cada uno de las preparaciones.
Al día siguiente MC y yo tuvimos la ocasión de dialogar un buen momento con el Chef Oriol Rovira y con la sumiller Carolina Calvo, su compañera, durante el desayuno y sobre todo después, en la cocina, donde pudimos visitarla y hablar de trufas, de producto y de cocina en general, de vinos, vamos de un poco de todo... Una pareja, que te hacen sentir como si estuvieses en tu casa. Como ya dije en anteriores comentarios en Els Casals, además de comer muy bien, se respira humanidad y afabilidad y se siente uno muy a gusto dentro de un marco paisajístico excepcional.
No se si podremos esperar hasta la próxima temporada de la trufa en febrero 2020, pues ya tenemos ganas de volver, y si podemos lo haremos en la temporada de setas. Esperamos compartir igualmente con nuestros amigos las próximas visitas. Muy recomendable.