Ya ocurre con muchas Chardonnays de la Comarca; que el primer año "revientan de acidez", y al segundo año se "domestican" un poco... y en cierta manera, se agradece.
Lo bueno (y muy interesante), es que hallas catado esta 2008 y esté tan exultante en el 2011. Aunque desde luego, si las manos del enólogo es buena (y más tratándose de Artajona, más), no me extraña que ofrezca tal capacidad vital.
Me alegro (por que te halla gustado, y por el cariño que le tengo a esa tierra).
Un saludo.
Javi.